A propósito del Argentina 1 Alemania 0 de hoy, y que parecería que LA BASE ESTÁ, les dejo un par de fragmentos seleccionados de un artículo (no existente en la web) publicado por Pablo Marchetti (director de Barcelona) en el diario Miradas al Sur del 21 de febrero de 2010:
"... el maradonianismo es la continuación de la fe peronista por otros medios. Porque supongo que a esta altura del partido (y de la historia) nadie discute que el peronismo no es más que una fe, un sentimiento y una creencia. Una fe palpable, contante y sonante que no sirve para demasiado, excepto que se considere una gran cosa el hecho de gobernar la Argentina. En cambio la fe maradoniana es una fe que se retroalimenta con más maradonianismo y que no tiene mucho más para ofrecer que un montón de salmos sublimes, tan contagiosos como la mismísima marcha peronista.
La última gran expresión de esta liturgia maradoniana fue el "sigan chupando", tal vez el mayor milagro desde el gol con la mano a los ingleses. Un "sigan chupando" que, como buen creyente, repito como un mantra a cada uno de los impíos, apóstatas y herejes que me vienen con tonterías como las críticas a la infinita cantidad de jugadores convocados por Diego a lo largo de estos dieciséis meses que lleva como director técnico de la selección argentina...
Está el técnico, está la mística, están los jugadores. Pero lo más importante de todo es que está el equipo, que hay una idea de juego, que la Selección tiene un proyecto y tiene un rumbo. Y, por sobre todas las cosas, está la certeza de que en el fondo, y parafraseando a Perón, en la Argentina "maradonianos son todos". Con todo eso, el Mundial parece ser un trámite. No hay nada que lleve a pensar que no va a ser así. Siempre y cuando la Fifa no le apunte una vez más al Diego y los árbitros nos dejen afuera. Si esto no ocurre, la Selección marcha derechito hacia la tercera copa de la historia. Aunque algunos sigan criticando el estilo, las convocatorias multitudinarias o el nivel de juego que, dicen, no es demasiado bueno. Pero bueno, qué se le va a hacer. Gorilas hubo siempre"
"... el maradonianismo es la continuación de la fe peronista por otros medios. Porque supongo que a esta altura del partido (y de la historia) nadie discute que el peronismo no es más que una fe, un sentimiento y una creencia. Una fe palpable, contante y sonante que no sirve para demasiado, excepto que se considere una gran cosa el hecho de gobernar la Argentina. En cambio la fe maradoniana es una fe que se retroalimenta con más maradonianismo y que no tiene mucho más para ofrecer que un montón de salmos sublimes, tan contagiosos como la mismísima marcha peronista.
La última gran expresión de esta liturgia maradoniana fue el "sigan chupando", tal vez el mayor milagro desde el gol con la mano a los ingleses. Un "sigan chupando" que, como buen creyente, repito como un mantra a cada uno de los impíos, apóstatas y herejes que me vienen con tonterías como las críticas a la infinita cantidad de jugadores convocados por Diego a lo largo de estos dieciséis meses que lleva como director técnico de la selección argentina...
Está el técnico, está la mística, están los jugadores. Pero lo más importante de todo es que está el equipo, que hay una idea de juego, que la Selección tiene un proyecto y tiene un rumbo. Y, por sobre todas las cosas, está la certeza de que en el fondo, y parafraseando a Perón, en la Argentina "maradonianos son todos". Con todo eso, el Mundial parece ser un trámite. No hay nada que lleve a pensar que no va a ser así. Siempre y cuando la Fifa no le apunte una vez más al Diego y los árbitros nos dejen afuera. Si esto no ocurre, la Selección marcha derechito hacia la tercera copa de la historia. Aunque algunos sigan criticando el estilo, las convocatorias multitudinarias o el nivel de juego que, dicen, no es demasiado bueno. Pero bueno, qué se le va a hacer. Gorilas hubo siempre"
2 comentarios:
Gracias por la analogía compadre, esta buena, maradonismo = peronismo. Hace rato que no se me escapaba la correlación entre el desprecio al diez y la tendencia garca.
La argentinidad de Diego es la suma de lo que los cipayos desdeñan, es la expresión moderna de la barbarie que Sarmiento puso en palabras del sentimiento europeizante y colonial de las oligarquías vernáculas. Todo lo que es verdadero, su fraseología, sus calenturas sus alegrías son la abominación de las clases chetas y vasallas de una idea de superioridad racial.
Un abrazo tucumano.
Coincido con todo excepto esta frase: "La última gran expresión de esta liturgia maradoniana fue el "sigan chupando", tal vez el mayor milagro desde el gol con la mano a los ingleses"
El Diego patentó muchísima frases buenísimas en el Medio:
Se le escapa la tortuga.
Le toma la leche al gato.
El cartonero Báez.
La pelota no se mancha.
Les hablé con el corazón y me contestaron con el bols... Ah, no. Esa no...
Y la que zanja definitivamente la disputa sobre si Pelé o Maradona fue el mejor de todos los tiempos: Pelé debutó con un pibe!
Saludos, Aldo.
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