domingo, 29 de marzo de 2009

QUE PAREZCA UN ACCIDENTE...


Les dejo este párrafo:
"Se ha dicho de Elisa Carrió, con abundancia nunca bien intencionada, que sólo sabe desplegar un discurso apocalíptico. De hecho, ella se transformó en protagonista central de la política anunciando grandes males, que a veces se cumplen y otras veces no, y prometiendo de manera simétrica grandes soluciones salvíficas, que las más de las veces quedan solamente en promesas...
Esta señora que levanta tempestades aunque en su discurso proclame la concordia, de tanto anunciar el Apocalipsis político terminó sufriéndolo en carne propia. Los astros se le desacomodaron hasta dejarla en la situación más incómoda que pueda imaginarse. Ella, que se puso al hombro casi cuatro millones y medio de votos en la elección que hizo presidenta a Cristina Kirchner, quedó sometida al dilema de competir en la elección de este año y correr el riesgo de una fea derrota que la saque de la cancha, o rehuir este duelo electoral y tratar de preservar, aun magullada, su estampa, para intentar recomponerse de cara a la próxima batalla presidencial.
Las trompetas de los siete ángeles del Apocalipsis empezaron a sonarle cuando su amiga Gabriela Michetti, imbatible entre los porteños según todas las encuestas, le cortó el rostro a sus insinuaciones de acordar entre ellas para no toparse en la elección de junio...
Con todo, si se nos permite una respetuosa analogía con la política, sería bueno recordar que el Apocalipsis anuncia, después de la destrucción, el triunfo de Dios sobre todos los poderes que se le oponen. Es el libro de la esperanza"


Estas frases no corresponden a ningún miembro del gobierno nacional ni a un periodista de Página 12. El autor de esta "cruel" extremaución política, no exenta de fina ironía, no es otro que Julio Blanck en Clarín de hoy. Parecen decirle: Carrió, ya no te necesitamos: fue lindo mientras duró. Te soltamos la mano. Ahora nos tenemos que concentrar en el colorado De Narváez, al que enfocaremos hasta en los partidos de la selección argentina si es necesario.

Sigamos jugando. Adivinen quien dijo esto:

"Cabe sospechar que en verdad lo que le molesta a Clarín es que haya otros empresarios u otros grupos económicos que también se interesen por los medios de comunicación, una conducta que se sabe no es novedad en la obsesión de ese holding por ahogar a la competencia y buscar erigirse como el monopolio exclusivo de la opinión y el dominio de los medios en la Argentina. No le basta a Clarín con presionar al Gobierno para lograr que le apruebe el control casi absoluto del mercado de la TV por cable en el país (ningún Estado civilizado aprobaría lo que Clarín practicó de facto como la fusión ilegal de Multicanal y Cablevisión), tampoco presionar para impedir que se le permita a las telefónicas competir en servicios de TV que asegurarían a los argentinos una mayor y mejor oferta diversificada de medios, dominar la comercialización del fútbol por TV para también quedarse con todos los canales que intentan sanamente competir con ellos en el interior, y últimamente lanzarse a la virtual destrucción de los diarios locales en las provincias con la edición y distribución directa de Clarín vía satélite en las provincias. Por no hablar de la grosera competencia desleal a la que se somete a todos los medios gráficos que no pactan con Clarín, por el domino absoluto que ejerce ese grupo económico con el monopolio de la producción de papel para diarios a través del control de Papel Prensa. O la vocación por comprarse la mayor cantidad de frecuencias de radio en el interior aun sin utilizarlas, ponerlas a nombre de otras compañías para burlar las leyes que impiden a una misma empresa adueñarse de radios y cables en todo el país, y evitar así que surjan otras expresiones que no estén alineadas con los intereses de Clarín"

Se sorprenderán mucho: Lo dijo el mismísimo colorado De Narváez desde su diario. Parece que estos muchachos no escucharon el llamado del episcopado a la "paz social".
Si entre bomberos se pisan la manguera...

sábado, 28 de marzo de 2009

EL BAILE de ETTORE SCOLA


No sé que me pasa hoy... siento la necesidad de distenderme, de alcanzar la "paz social" de la que habla el Episcopado y que tan rápido "acataron" los patrones rurales.

Por eso retomo mi sección preferida: "Las mejores escenas de las grandes películas". Y lo hago con esta joyita: EL BAILE (1983) del director italiano Ettore Scola. ¡Qué película!

Recuerdo que ví esta película cuando iba a los últimos años de la secundaria en un cine ya desaparecido de San Miguel de Tucumán dedicado al cine-arte: el Cineteca. ¡Qué goce estético! ¡Qué placer intelectual inolvidable de mi adolescencia!

Y eso que esta película no tiene diálogos. Es la música su principal protagonista: se reflejan casi cincuenta años de la historia de Francia (década del 30, ocupación nazi y posterior liberación, el mayo francés y el triunfo del individualismo entre otros hitos) a través de las canciones, modas de época y las caras de personajes logradísimos que habitan un salón de baile parisino.

Aquí describen bien el comienzo: Lentamente, comienzan a ingresar mujeres tan dispares como caracteres psicológicos existen: la histérica, la tímida, la desaliñada, la femme fatal, la anciana, la enamoradiza, aunque todas pendientes de su aspecto a través del espejo del salón. Luego de arreglarse superficialmente, las mujeres se sientan en cada mesa a la espera del sector masculino. Segundos después, una gran cantidad de hombres aparecen en el salón e imitan a las damas en la confirmación de su belleza exterior en el espejo. También el grotesco se manifiesta en ellos: se pueden encontrar el gordo, el tímido, el extrovertido, el anciano, el de anteojos, el dandy, el negro, el alto sin gracia, entre otros.

Y empieza el baile... no se lo pierdan:


jueves, 26 de marzo de 2009

¿ LLEGAN A JUNIO ?



Ojo! Me estoy refiriendo a un gran sector de la oposición realmente existente.

LA CONFESIÓN:

Carrió ya se bajó de su candidatura por temor a una derrota aplastante; pero antes había incurrido en esta gravísima confesión:

Frase textual de Carrió: "no tenemos ningún problema en defender a llamados grupos económicos si es en defensa de la libertad de expresión".

¿Fuerte no? Afirmar que defender a los monopolios periodísticos es defender la libertad y la independencia periodística traspasa todos lo límites. Carrió: MONOPOLIO ES IGUAL A CENSURA.

Sus próximos razonamientos serán algo así:

  • En defensa de la libertad de competencia, hay que apoyar a los monopolios realmente existentes.
  • En defensa del fútbol hay que apoyar a Grondona y a la FIFA a muerte.
  • En defensa de los consumidores hay que bancar a Wal Mart y a Carrefour, no nos queda otro en nombre de la libertad.
  • En defensa de la cultura popular, hay que apoyar todo lo que digan Susana Giménez y Tinelli.
  • En defensa de la libertad de culto, no me queda otra que salir a bancar todo lo que diga el rabino Bergman.
  • En defensa de la autodeterminación de los pueblos, no queda otra que apoyar al embajador norteamericano.
  • La última será: en defensa de la democracia tendremos que ir a tocar la puerta de los cuarteles.

No se puede ser más impresentable. Parece que nada importa, ni siquiera hacer el ridículo. Si se profundiza esa línea, el lema de campaña podría ser: La Coalición Cívica cumple, Clarín dignifica”

Pero, curiosamente, la confesión de Carrió viene desde antes. En enero de 2009 afirmó en un reportaje de Chiche Geblund: “fui la candidata mascarón de proa de los grupos económicos que muchas veces me dijeron: vos sos la candidata y nosotros manejamos el poder. Y yo dije no el poder para mí”

La verdad que todo este fragmento del reportaje es imperdible y revelador. Lo increíble es que lo subió la propia Coalición Cívica. Por favor, no lo bajen de youtube!



LA ENCERRONA:

Sostiene lúcidamente el periodista Alvaro Aurane en el diario La Gaceta de Tucumán:



“…el errático comportamiento de una oposición que por momentos parece
no buscar el poder (en Tucumán, todos los opositores quieren salir
segundos y ni uno solo convocó a ganarle al alperovichismo) puede
hacer que los peores momentos del oficialismo luzcan como sus horas
más lúcidas. Entonces, que la Presidencia apele desesperadamente al
apoyo de los gobernadores parecerá, en breve, una brillante jugada.

Un oficialismo que, aun en este escenario, tiene dos buenas noticias
para darse: se adelantan las elecciones y la oposición nada parece haber
aprendido… Ahora bien, que los opositores aún no tengan definiciones,
cuando restan menos de 100 días para ir a las urnas, ni siquiera es lo
más complicado del escenario político. Problemas, lo que se dice
problemas, tienen desde el jueves, cuando la Presidenta, Cristina
Fernández, decretó que las retenciones a la exportación de la soja
serán coparticipadas a las provincias. Esa disposición prácticamente
ha dejado sin discurso a buena parte de la oposición”
 
La voz de la mala conciencia de los patrones rurales, me refiero a Héctor 
Huergo de Clarín Rural, sostuvo sobre la coparticipación de las retenciones:
Era el escenario más temido, porque si los gobiernos provinciales
 agarran parte de las retenciones, no te las sacás más de encima".
 
En ese contexto, y después del fracaso de la marcha por la inseguridad, justo cuando los piquetes
agrogarcas se están cayendo por su propio peso, aparece el episcopado llamando a “restablecer
la paz social”. ¿No será una soga que le están tirando a la oligarquía rural para bajarse de la
protesta sin aparecer cómo derrotados por el gobierno? Soldado que huye sirve para otra batalla…
diría… ¿Quién dijo esa pelotudez? No sé… Carrió ya le hizo caso… 
Apuesto a que Biolcati y Buzzi también. 

martes, 24 de marzo de 2009

MANIPULACIONES, SILENCIOS Y ALGO MÁS...


Esta tapa de Clarín del 06 de marzo de 2009 es demasiado clara respecto de la importancia que se decidió darle, oportunamente, a las declaraciones de la jueza de la Corte Suprema de la Nación Carmen Argibay. No está mal.

Ahora bien, ayer Carmen Argibay dijo esto:
Consideró "absurdo reclamar la pena de muerte para los delincuentes y pidió políticas sociales de inclusión". También dijo que "la problemática de la inseguridad está inflada por los medios de comunicación". Criticó a quienes marcharon la semana pasada hasta la Plaza de Mayo para reclamar mayor seguridad, al sostener que "no hemos visto a estas personas marchando contra el hambre y la pobreza, son los programas sociales los que combaten realmente la delincuencia"

"Primero tenemos que empezar a ver la cantidad de muertes evitables por falta de atención médica, de programas de salud, por falta de atención a la niñez", enumeró. "Recién entonces podemos empezar a hablar de lo que estamos haciendo para remediar la inseguridad", agregó

Al cuestionar los reclamos de pena de muerte encabezados por Susana Giménez, tras el crimen de un colaborador, Argibay explicó: "así no vamos a ningún lado, porque ponemos el caballo adelante del carro". "El problema es mundial, y desde Caín y Abel que pasa esto", ironizó.

También refutó la afirmación que hizo el cura Guillermo Marcó en la marcha por seguridad en la Plaza de Mayo de la semana pasada, de que los delincuentes ya aplican la pena de muerte contra sus víctimas, al aclarar que "las penas son castigos que sólo aplica el Estado, y cuando alguien mata a otro, comete un delito". "Yo diría que -el tema de la inseguridad- está exagerado periodísticamente". "Son ustedes los que están inflando el tema", le dijo a los periodistas.

¿Saben dónde puso Clarín estas declaraciones hoy? En un pequeño recuadro en la página 38 de policiales. Con este ejemplo quiero mostrar cómo marcan agenda, manipulan y hacen política los multimedios. ¿Se entiende?

Viene bien recordar estas cosas en el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia a 33 años del golpe militar del año 1976. Aunque haya gente que todavía elija el silencio acerca de ésta fecha y se sienta cómoda con este discurso.

Muchos de mi generación, que tuvimos la suerte de vivir como jóvenes esos "mágicos años" del retorno a la democracia, mantenemos el compromiso militante con la memoria y el NUNCA MÁS que internalizamos en esa época, mientras subíamos "la Colina de la Vida":


lunes, 23 de marzo de 2009

LA COMEDIA OLIGARCA QUE FALTABA

Es cierto, ahora que a Buzzi, De Angeli, Biolcatti, Carrió y compañía ya no les creen ni las bases, los camioneros los persiguen enfurecidos y TN no sabe para donde correr, tenía que salir esta comedia para toda la familia. Que la disfruten:

domingo, 22 de marzo de 2009

LOS MACHOS


El piquete ruralista tucumano sobre ruta 9 está dando que hablar éstos días, no precisamente para bien. El pasado martes, agredieron verbalmente y amenazaron con atropellar a una fotógrafa del diario local La Gaceta. Dicho hecho motivó el siguiente comunicado emitido por la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA) para “repudiar el ataque intimidatorio y sexista de ruralistas autoconvocados contra nuestra colega Analía Jaramillo del diario La Gaceta de Tucumán. La agresión partió de un integrante del piquete, que luego de intentar arrollar con su camioneta a nuestra colega, la insultó con palabras soeces, haciendo burla de su condición femenina y su labor periodística”, dice el texto. Ante los exabruptos del exaltado, el grupo de autoconvocados lo hizo callar y pidió disculpas a nuestra asociada, pero sin avenirse a dar el nombre del agresor, pese a resultar notorio que lo conocían. “Durante el llamado "conflicto del campo" distintos colegas de prensa han visto dificultada su labor y han sido hostigados por los piquetes agrarios en las rutas. Exigimos de los organizadores de estas protestas y de sus entidades representativas el estricto respeto a la libertad de prensa y los hacemos directamente responsables de la integridad física de nuestros colegas”, prosigue. “ARGRA se reserva los derechos que le asisten de efectuar las denuncias penales y civiles por estos actos de violencia, intimidación y discriminación laboral y sexista”, concluyen.

El diario La Gaceta denunció el hecho en su edición on line del miércoles 18 de marzo pasado publicando la foto del agromacho:


Bajo el título “Maltrataron a una fotógrafa de La Gaceta”, la nota daba cuenta de que “un joven ruralista casi atropella con su camioneta a la trabajadora de prensa” de ese medio. “Jaramillo tomaba fotografías cuando observó que una camioneta F-100 blanca se le venía encima y tuvo que hacerse a un lado para evitar ser impactada. Cuando le reclamó más cuidado, el conductor se burló y, de forma jocosa, le dijo que en realidad no iba a atropellarla. Luego comenzó a discutir con la fotoperiodista y a decirle palabrotas”, explica el artículo. “Otro ruralista que observó la escena le llamó la atención al joven, que cesó con el hostigamiento. Luego, integrantes de la Comisión de Ruralistas Autoconvocados, pidieron perdón a Jaramillo por el altercado. El joven, sin embargo, no cesó con su maltrato. ‘La verdad es que te tendría que haber atropellado’, le dijo al oído a Jaramillo”, concluye la nota.

Lo que no podrán alegar, a partir de ayer sábado, los integrantes de este piquete rural tucumano es coherencia. La supuesta “hombría y machismo” del que hizo gala este personaje con una mujer fotógrafa quedó de lado cuando las papas realmente quemaban. Me refiero al “encuentro cercano” que tuvieron estos mismos piqueteros rurales con la hinchada de “los santos de la ciudadela” que se dirigía a Buenos Aires a ver el partido con River. El diario La Gaceta lo relató así:

“Alrededor de las 17 comenzó otro de los piquetes ruralistas y se produjo un momento de tensión cuando comenzaron a llegar los hinchas de San Martín, que se dirigían a Buenos Aires a presenciar el partido con River Plate. Un grupo de simpatizantes del “santo” se dirigió hasta los agricultores para exigirles que levanten el corte y les permitan seguir su viaje. “Te pido por favor que saques el tractor de la ruta para que podamos pasar”, dijo uno de los fanáticos. “Ya lo corremos, en 10 minutos más”, respondió un productor. “En 10 minutos no, ya. Atrás viene toda la barra y esto va a ser peor”, comentó el hincha “santo”. Finalmente, los agricultores despejaron la ruta y los simpatizantes de San Martín pudieron seguir su viaje.


Aparentemente sólo se tira la camioneta encima a mujeres indefensas. Raro el machismo de estos ruralistas.

jueves, 19 de marzo de 2009

PODER Y VISIBILIDAD

Sostiene Ariel Magirena: “Nunca como hoy la relación entre medios de comunicación y poder había respondido con este nivel implacable de dialéctica al punto de romper los paradigmas fundamentales del periodismo… Los medios degradan, corrompen y sustituyen el sentido común mientras encorseta a los periodistas y comunicadores en paradigmas vetustos pero que le son favorables”.

En este contexto, sólo logran VISIBILIDAD los poderosos, sus empleados o coro de aduladores u oportunistas que defienden el discurso hegemónico mediático que los monopolios juzgan conveniente (a sus intereses, claro).

En este marco, la Presidente Cristina Fernández presentó su proyecto de ley de servicios de comunicación audiovisual ( acá el texto completo )

Reproduzco algunos párrafos del discurso de Cristina:

“Si ustedes me dijeran qué espero como resultado de esta ley, diría que es que cada uno aprenda a pensar por sí mismo y decida pensar, no como le marcan desde una radio, desde un canal, sino que, precisamente, pueda acceder a toda la información, a todas las voces, a todas las creencias religiosas, a todas las creencias políticas para que, entonces, ese ciudadano pueda decidir a qué dios le quiere rezar, a qué partido puede ingresar, quién es el que no le gusta, quién es la que le gusta; en definitiva, yo creo que solamente podemos formar ciudadanos libres si esos ciudadanos tienen la posibilidad de formar su propio pensamiento

“El hecho de reservar el 33 por ciento del espacio audiovisual de la Argentina para organizaciones que no tengan fines de lucro, nos va a dar una garantía de ello…Por primera vez iglesias, universidades, fundaciones, sindicatos, organizaciones que no tienen fines de lucro, podrán acceder a tener una señal de transmisión, una voz, un lugar donde expresar lo que piensen, lo que sienten, lo que les pasa y creo que eso es, precisamente, articular, entonces, entre el Estado, la sociedad y el mercado”

“Durante mucho tiempo hubo mucha negación por parte de los fanáticos del mercado de la importancia del Estado y, por supuesto también, de la sociedad, porque, en definitiva, cuando alguien afirma que el mercado todo lo resuelve, todo lo asigna y sobre eso no se puede discutir, hay una clausura, no solamente del Estado, porque, en realidad, cuando estaban clausurando el Estado estaban clausurando la participación de la sociedad. Lo que pasa es que quedaba mucho mejor decir que el Estado era ineficiente a reconocer verdaderamente que es mucho mejor para el mercado cuando la sociedad no interactúa”

“Esta ley que va a ser de la sociedad y que va a ser de la Argentina, sea una voz plural en lo social, en lo federal y que pueda ser un instrumento para que todos tengamos el derecho a ser visibles en la sociedad, que esta es la otra cosa que muchas veces nos han negado, no nosotros que, obviamente porque ocupamos cargos altos aunque quieran ocultarnos es más difícil, pero sí otros, los invisibles, los que solamente aparecen en una tragedia o solamente son instrumentos para presentarlos como demandas contra tal o cual idea”

“Yo creo, sinceramente, que tenemos una oportunidad muy grande todos los argentinos de seguir construyendo democracia, de seguir construyendo participación, de seguir construyendo autonomía nacional, de seguir construyendo esto que estamos haciendo, con dificultades, con contradicciones, con marchas y contramarchas, pero con la convicción y la certeza de que estamos construyendo entre todos un país diferente, el país que alguna vez soñamos”

Acá el discurso completo

EDUCANDO AL SOBERANO

Desde Tucumán, si nos preguntamos: ¿Cuál es el ciudadano más informado del país? uno no duda mucho en responder: los porteños. Por eso sorprende esta nota del diario La Nación sobre el nivel político de los habitantes de la ciudad de Buenos Aires.
¿Buena carne de multimedios no?
Por eso, porteños o no, es sumamente esclarecedor este video:



Para los desconfiados, aquí los datos en inglés.

miércoles, 18 de marzo de 2009

NI CON LA AYUDA DE DIOS...


Poquito... poquito, casi nada. Clarín dijo 8000 personas y luego lo subió a 10.000 (igual un papelón muchachos...) en la marcha contra la inseguridad convocada en Plaza de Mayo por una ONG encabezada por la hija del General Guglielmi, acusado de torturador durante la represión ilegal.

Ojo: convocaron desde Susana Gimenez hasta Tinelli, con la simpatía y el coro de toda la oposición, Macaya Marquez en Fútbol de Primera, los programas de chimentos (asaltaron a casi todas las famosas esta semana), y con una previa de escalada mediática impresionante machacando con el tema: si un turista se guiara por la televisión de éstos últimos días creería que estaba en Gaza, no en Buenos Aires.

Oradores: el inclasificable rabino Bergman, señaló: "hoy tenemos democracia, pero no tenemos república" ¿?. El otro orador, el sacerdote católico Guillermo Marcó, ex vocero del cardenal Bergoglio venía de condenar en declaraciones radiales el uso del preservativo, señalando que "es mentira que éstos sean una solución para combatir la pandemia del sida", apoyando las declaraciones del Papa Benedicto XVI.

Observen la ideología de los manifestantes en la marcha:


¿Hace falta agregar algo a ese cartel? Sepa al menos, señora, que ni Hitler, ni Bush, ni los militares genocidas argentinos eran pobres, pero vaya si fueron asesinos. Los pobres, señora, no necesitan que ud. los acepte; pero eso sí señora, no comen vidrio: seguramente no votarán igual que Ud.
Y Ud., señora, lo llamará fraude, clientelismo; pero esos pobres que ud. "acepta" no harán más que actuar en defensa propia. ¿Sabe porqué? Porque EL PUEBLO NO ES "LA GENTE", señora.
EL PUEBLO NO ES BOLUDO.
Acá describen a la perfección (y está imperdible) a la "gente como Ud., señora".

lunes, 16 de marzo de 2009

LOS OTROS CÓDIGOS DEL FÚTBOL


No se preocupen, no se trata de una opinión más sobre la gran polémica nacional: si Maradona o Riquelme tienen más “códigos”. Como futbolero que soy, sé que en esa discusión interviene la pasión, el sentimiento, y con eso no me meto: todos, en definitiva, terminan teniendo su parte de razón.

Lo mío es más subterráneo, más profundo. Apunto a las entrañas mismas del monstruo: el negocio del fútbol.

Este domingo pude ver un fragmento de Fútbol de Primera en el que el conductor y comentarista deportivo Macaya Márquez “improvisó” un monólogo REVELADOR. Su argumento fue más o menos el siguiente:


Comenzó “condenando la violencia que precedió al partido entre Boca – Argentinos Juniors, señalando que la misma era una consecuencia de la inacción del gobierno. Luego alabó las opiniones acerca de la inseguridad de la gente de la farándula (que parece que no saben, pero SI saben Y MUCHO, dijo). Para finalmente concluir que el gobierno debe ocuparse de esas cosas y no de “atacar el negocio del fútbol televisado y el patrimonio de las personas”. Por si fuera poco amenazó: si se afectara a la AFA y sus contratos con TyC Sports, la FIFA podría dejar a Argentina fuera de las competencias internacionales. Por eso muchachos del gobierno: ocúpense de la inseguridad”

Fue así de brutal, de sincero, y con ello Macaya Márquez no hizo más que verbalizar la estrategia que los multimedios callan: a la ley de radiodifusión no se la puede combatir con argumentos jurídicos, es imposible. Se pierde ante la simple comparación con cualquier país del “primer mundo”. Tampoco se la puede combatir políticamente: se trata de una ley de la dictadura armada para favorecer monopolios amigos.

Por eso, ahí está la INSEGURIDAD y sus bufones faranduleros, los actuales voceros irracionales de la nueva ola conservadora, prestos a exigir ajusticiamiento (el que mata debe morir), no justicia.

Y… por supuesto, como diría Macaya Márquez: “el gobierno debe ocuparse de esas cosas y no de atacar el patrimonio de los multimedios”

¿Ley de Radiodifusión? Mejor no hablar de ciertas cosas…

Es tiempo de MANO DURA a los pibes chorros.

Puro PACO MEDIÁTICO como diría Manolo.


domingo, 15 de marzo de 2009

"DEBE SER TERRIBLE MORIR POR TUS VIEJOS PECADOS CUANDO ESTÁS TRATANDO DE REMEDIARLOS"


La revista Veintitrés publica esta semana este jugosísimo reportaje a José Pablo Feinmann, donde opina de todo: Montoneros, los asesinatos de Aramburu y Rucci, Susana Giménez y la pena de muerte, la Carrió, los intelectuales, el “doble comando” y la ley de radiodifusión. Vale la pena:


–¿La sociedad todavía no comprende el porqué de la emergencia de los Montoneros?

–Creo que no. De otro modo, no los odiaría tanto. Debería, al menos, haber una mirada más compasiva. Estos muchachos, que tenían veintitrés años, fueron condenados a tener que matar. Los condenó el sofocamiento total antidemocrático que excluía a la mayoría del pueblo y al líder de esa mayoría. Olvidemos por un momento todo lo que después sucedió y situémonos en mayo del ’70. El crimen de Aramburu se produce bajo el gobierno de un cursillista, un católico franquista que le consagra el país a la Virgen. Estos pibes realmente no tenían salida, pero encuentran un gran culpable. Aramburu firma su sentencia de muerte cuando firma el decreto 4161 que excluye al justicialismo de la vida política del país. Lo notable es que, cuando es secuestrado, Aramburu no es el mismo. Debe ser terrible morir por tus viejos pecados cuando estás tratando de remediarlos.

–La postura de muchos setentistas es decir: “Nos equivocamos”. En cambio, pareciera que usted dijera que, si fue una equivocación, fue en parte inevitable.

–Hasta ahí. Cuando empieza la democracia, la violencia es injustificable. Yo detesto a los Montoneros a partir de Cámpora, y sobre todo a partir del asesinato de Rucci, que es uno de los hechos más canallescos de la historia argentina. Con el 64 por ciento de los votos, Gelbard en el Ministerio de Economía (es decir, un judío comunista que representa a la pequeña y mediana industria) y Rucci en la CGT, estaba forjando algo. A los dos días de la elección matan a Rucci. Es un asesinato brutal, un asesinato impolítico, un crimen contra el país. Eso sólo lo pudo haber hecho Firmenich, que es la desgracia de los Montoneros. “Manolito” Firmenich. También le decían “Maderita”. Y, bueno, viejo, con Firmenich, con Galimberti... ¡Qué conducción bastarda para haber dirigido a tipos como Walsh, Oesterheld, Verbitsky o Gelman! Yo no lo entiendo.

–¿Cómo recibió usted el asesinato de Aramburu?


–Pensé: “Y bueno, esto alguna vez tenía que pasar, por algún lado tenía que explotar”. El año anterior había sido el Cordobazo, metodología con la que concuerdo mucho más, con los obreros en la calle, con su dirigencia sindical, con Tosco, Atilio López, René Salamanca. Estoy totalmente contra el foco y la teoría guevarista del foquismo, me parece nefasto todo eso. De todos modos, cuando lo matan a Aramburu, digo: “Y bueno, qué mala suerte. Pero esto tenía que ocurrir”.


–En la novela se dice que Aramburu quería traer a Perón para incluirlo en el sistema y los Montoneros querían que regresara para destruir al sistema.


–Es trágico. Aramburu les ofrece lo mejor que está haciendo, que son sus tratativas para el regreso de Perón. A esta altura de la historia argentina se puede especular que si le hubiese salido bien a Aramburu, se hubiera ahorrado mucha sangre. Perón volvió. Lo terrible es que lo hizo demasiado tarde. Cuando llega dice: “Muchachos: freno. Un gobierno populista distribucionista. Nada de revolución”. Y, claro, habían puesto muchos muertos. Así Perón conoce por primera vez algo que desconocía: la rebelión en sus filas, el quiebre de la lealtad. Esa consigna terrible que se cantó el 1º de mayo: “Vea, vea, vea, qué manga de boludos, votamos a una muerta, una puta y un cornudo”. Ese 1º de mayo el clima ya no era popular: estaba la militancia en estado de enfrentamiento. Yo andaba por ahí con dos o tres amigos. La otra consigna que cantaban era: “Vea, vea, vea, qué flor de pelotudos, votamos a una muerta, a un brujo y a un cornudo”. El viejo escucha eso y se vuelve loco. Perón, que creía controlar todas las contradicciones desde afuera, cuando regresa, se da cuenta de que ya no puede ser un dios.


–¿Se podría hablar de tragedia otra vez como usted la plantea, justos contra justos?

–Claro, los Montoneros con su proyecto revolucionario y Perón con su plan burgués, distribucionista, estatista, que hoy sería intragable porque es más o menos lo que intenta balbucear Cristina Fernández y la ven como si fuera Chávez. En ese momento era viable, pero para la izquierda era escaso. “No peleamos tanto tiempo para esto, General”. Hubo demasiados muertos, verdaderamente. Una tragedia.


–Entonces, para usted, la violencia política anterior al ’73, ¿era un acto de justicia?

–Para mí, desde 1955 hasta 1973, sólo hay gobiernos ilegítimos. Y todas sus muertes son asesinatos. La de Felipe Vallese pero también la del ladrón que mató la policía. Por el otro lado, mientras hay dictadura existe un principio que dice que el pueblo tiene el derecho a alzarse en armas contra gobiernos tiránicos. Mi mirada es compasiva respecto de los grupos guerrilleros. Esa generación habría podido elegir otro camino de no haber estado sofocada. Además, era una época en la que la violencia estaba legitimada: tenés la revolución cubana, Vietnam y el general Giap, Estados Unidos derrotado, Mao Tse Tung, el Che Guevara, Argelia, el prólogo de Sartre a Fanon.


–Por eso, el debate de Del Barco ¿cuenta con su adhesión? ¿Usted diría: “Fuimos asesinos”?


–Lo que tiene Del Barco es que elige un ejemplo muy triste, muy desgarrador, muy humillante. El EGP. Diecinueve tipos que salen al monte y, sin enfrentarse al ejército ni a nadie, terminan matando a dos pibes de los suyos. Pero eso es condenable ya no como guerrilla, sino como grupo humano. No se puede juzgar a los grupos guerrilleros a partir de la experiencia de Massetti. Fue una experiencia de una insensatez total. Es un ejemplo muy infame, una perla muy terrible. Es como pensar en Rosas a partir de Camila O’Gorman y trazar desde ahí el panorama.

–En algún momento usted planteó que no debía ocultarse que el Che Guevara comandó los fusilamientos en Cuba.


–Mil quinientos fusilados hubo. La mayoría torturadores, tipos del ejército batistiano. Yo estoy en contra de la pena de muerte. Estoy con el “no matarás” de Del Barco. Pero el hombre mata.


–Si hablamos de pena de muerte hoy, hay que pensar en Susana Giménez.

–Yo no pienso en Susana Giménez (risas). Bueno, por lo mediático ahora aparece esta mujer que dice atrocidades porque es una ignorante. La civilización está perdida, porque no ha logrado a lo largo de toda su historia valorar la vida y la pulsión de muerte es más potente que lo que Freud llama el eros. Me produce escozor cuando los periodistas le preguntan a la gente qué haría si le matan un hijo. “Ah, yo saco una escopeta y salgo a matar gente”. Si a vos te ponen en el lugar de un padre al que le mataron a su hijo es probable que pierdas la cabeza y salgas a matar. Hay que preguntar sin esa carga que impide razonar.


–Sin embargo, los organismos de derechos humanos que sí tenían esa carga no salieron a pedir muerte sino justicia.


–Este país lo más honroso que tiene son las Madres, que no han pedido nunca una muerte. No se mató a nadie, a un solo represor. Eso es increíble. No hubo una venganza. Es excepcional.


–En cierta época el debate sobre la legitimidad de la violencia política lo planteó Sartre. Hoy, el debate sobre la pena de muerte es impulsado por Susana Giménez...

–Me revela los tiempos. Son tiempos comunicacionales en los que la televisión se adueñó de la subjetividad de las personas. Hay un poder comunicacional que sujeta las conciencias.

–Hablando del asunto, está por presentarse la nueva Ley de Radiodifusión. ¿Qué opinión le merece?


–Ante todo, pienso que es un gesto de gran valentía de este gobierno, pero no sé si tiene el poder para imponerlo. Ante todo acto que impulsás, te tenés que preguntar qué poder tenés para imponerlo. Podría ser un paso en falso.


–Alguna vez dijo a Veintitrés que Kirchner era un Tío Patilludo que no repartía. Las retenciones eran por lo menos un intento de sacarles algo a los que más tenían...

–Y casi se van a los caños. Me daban ganas de pedirle perdón por todo lo que hinché por la distribución de la riqueza porque, cuando quiso distribuir el tres por ciento, casi cae el Gobierno.


–Imagine que Kirchner presenta la nueva ley de medios...


–¿Kirchner o Cristina?


–¿No es lo mismo?


–Creo que Cristina es más inteligente. Más brillante. Por cómo hila sus ideas, el modo de razonar, su brillantez expositiva. Es muy superior a Kirchner. Ahora si Néstor es un animal político más poderoso que ella, no lo sé. Pero no comparto lo que está haciendo últimamente. Hace dos años saqué una nota llamada “El factor Barrionuevo” y no le cayó nada bien. Y ahora tenemos otra vez el factor Barrionuevo y hasta el factor Saadi, que lo han llevado a un fracaso en Catamarca. Ahí, Kirchner no se lució. En cambio, a ella la noto cada vez más segura, más estadista. Me interesa la figura de Cristina.

–¿La pasión de Néstor podría entorpecer la gestión de Cristina?


–Podrían chocar o complementarse. El empuje feroz que tiene él a veces puede complementarse con la racionalidad de ella. No creo que el país esté gobernado sólo por ellos. Hay dos tipos que yo respeto mucho. Uno es Massa, que está laburando bien, pero detrás de él está Juan Abal Medina hijo, que es un tipo brillante. Es un linaje el de los Abal Medina. Habría que hacer una novela sobre ellos. Él está ahí, al lado de Cristina.

–¿Él es su nexo con los Kirchner?


–No, yo no tengo nexos con ellos.


–Tampoco está en Carta Abierta (el grupo de intelectuales que apoya a Kirchner).

–No, estoy acá (señala su escritorio). El Kirchner que conocí en 2003 quería hacer un partido de centroizquierda, desmenemizar la política argentina, crear un mercado común latinoamericano. Después empezó a hacer algo que quizá sea inevitable: apropiarse del aparato peronista. Quizá si no hacía eso, a esta altura no estaba en el poder. Cuando pasó, me dije: “Yo no estoy para eso, para tomar el PJ hay que ser político”. ¿Y qué es la política? Es lo que decía Perón en su Manual de conducción política, que tengo en la edición de 1951, la auténtica, totalmente marcada. Desde Hegel que no releía nada tan seriamente (risas). El libro es muy bueno. Ahí dice Perón: “Hay tipos que vienen y yo quisiera darles una patada y les termino dando un abrazo”; “Si solamente voy con los buenos voy a llegar con muy pocos”. Eso es la política.


–¿Pero esa política le dio frutos a Kirchner? Está con Curto, con Ishii y, sin embargo, Duhalde acumula por otro lado. Se va Reutemann, se van figuras del Frente para la Victoria.


–Lo veo débil a Kirchner, con todos los medios en contra, cosa que no pudo revertir. Con mucha intelectualidad antikirchnerista, que antes era socialdemócrata o radical de izquierda. Kovadloff, Sarlo... Bueno, Sebreli ha tenido muchas evoluciones. Hoy están en una posición furibundamente antikirchnerista. Son duhaldistas. Yo le diría a Sarlo: “Vos estás objetivamente jugando para Duhalde”.


–¿Carrió también?


–Claro, la única alternativa a Kirchner es Duhalde, porque el poder se da dentro del peronismo. Todos van a nuclearse alrededor del que Duhalde ponga, no alrededor de él porque es impresentable. Puede ser Reutemann. Ahí se va a formar el verdadero foco opositor.

–¿Carrió no diría: “Ni con Duhalde ni con Kirchner porque yo quiero la república”?

–No le creo nada. ¿Qué república quiere? ¿La suya? ¿Ella cree que puede hegemonizar algún proyecto? Es risible. Nadie le cree a Carrió. Ahora, si suma a Macri, a Lavagna, algo puede pasar.


–Los intelectuales que apoyan a Kirchner, ¿no son poco críticos?


–Deberían criticar más. Pero la verdad que no los veo mucho. Estoy escribiendo mucho. El suplemento sobre el peronismo en Página 12, ahí pongo mi posición política. Hay que ser pacientes y ver qué pasa. Con esta ley de medios, hay que ver si no se incendia el país.


–Volviendo a la novela, hay un personaje muy divertido, que es el tano de la pulpería de Timote, que le dice a otro: “Si estos pibes matan a Aramburu, se reciben de peronistas aprobando sólo una materia”.


–Sí. Y el Mundial sobre el que discuten en su pulpería. Es terrible, pero hay que leerlo así: al pueblo le importaba un pepino, también, la suerte de Aramburu. En todos los diarios salía que había sido secuestrado Aramburu. Está bien que festejaron. Pero de lo que más hablaron fue de fútbol ya que justo cuando estaba secuestrado comenzaba el Mundial de México. Y hablaban de ese partido ignominioso que perdió la selección contra Perú por el que no pudo participar de ese Mundial. Con pasión discuten ese partido.

–Leía el libro y pensaba: “Qué futbolero, Feinmann. No me lo imaginaba así”.

–Sí, sí. Ese partido lo sufrí como loco. Te lo juro. Fue un partido vergonzoso.


Acá les dejo este fragmento (está imperdible) de Timote , la nueva novela de Feinmann sobre el asesinato de Aramburu.





viernes, 13 de marzo de 2009

CRISPACIÓN OPOSITORA


Si éstas no son caras crispadas, ¿dónde está la crispación?

Gerardo Morales acusa a Kirchner de "vivo" y "loco" al mismo tiempo

Hace un par de días, créase o no, el Presidente de la UCR escribió esta Carta Abierta a Kirchner que pasará a la historia de la política bizarra argentina. Véase el profundo contenido ideológico de la misiva y la inclaudicable voluntad de lucha contra los privilegiados del país: ¡En qué te convertiste UCR!

CARRIÓ: ¡OJO! ¡ESTO MODIFICA EL CRONOGRAMA DE PROFECÍAS!


¡Pobre Lilita! No lo vio venir. Y ahora no sabe si el apocalipsis se adelantó o atrasó. ¡Un brujo por ahí!

martes, 10 de marzo de 2009

LAS CRISIS REALES Y LAS CRISIS CANALLAS


Ahora que los muchachos de la Mesa de Desenlace vienen por más, viene bien leer este artículo de Sandra Russo:

“Los millones que Occidente está volcando para salvar sus instituciones financieras no sirven de nada frente a una crisis mucho mayor: hay mil millones de personas al borde de la muerte por inanición. Esa es la crisis verdaderamente grave, y ese dinero no hace nada por ellos. Curiosamente, no lo he leído en un periódico americano, sino en uno de Bangladesh.” Esto es blanco sobre negro. Es una reflexión que vertió el lingüista Noam Chomsky en una entrevista publicada esta semana en El País. Mil millones de famélicos no constituyen una crisis en el mundo global. La globalización los fabricó, los asimiló y los naturalizó. Los parámetros con los que se evalúa qué tal anda el mundo dejan afuera el hambre, mientras tiemblan con las hipotecas. Si a la situación actual se la define como crítica, es porque los que entraron en crisis son los incluidos. Los excluidos va de suyo que no deben soportar ninguna pérdida más que la de la propia vida, porque no tienen más que eso.

El diario El País, que hace tiempo se inclina a la derecha, presenta a Chomsky como “uno de los intelectuales más conocidos y mejor valorados fuera de su país”, pero también lo salpica con dos adjetivos poco inocentes: “sempiterno idealista”. De modo que lo que diga el autor de Los guardianes de la Libertad, entre tantas otras obras que desnudaron la manipulación capitalista del sujeto, será leído como el pensamiento de un idílico defensor de las causas perdidas.

Todavía trabajando en su vieja oficina del MIT (Massachusetts Institute of Technology), Chomsky acaba de cumplir sus 80. Aunque ya se jubiló, sigue yendo diariamente al Departamento de Filosofía y Lingüística, donde una foto de Bertrand Russell preside su despacho. Chomsky fue una de las pocas voces con reflejos para criticar el silencio del nuevo presidente norteamericano ante el primer conflicto internacional que hacía necesaria una posición: el ataque israelí a la Franja de Gaza. Pero como él mismo explica, a pesar de que Estados Unidos puede efectivamente ser considerado un país con una gran libertad de expresión, “la libertad tiene muchas dimensiones y otras formas de control, por ejemplo, a través del impacto de la concentración de capital. Por eso usted verá mis artículos en diarios de Johannesburgo, pero nunca en The New York Times”.

Este hombre que vive y piensa en Estados Unidos no es influyente en su país. El aparato mediático privado pero oficial se ocupa de que él escriba y diga lo que quiera, pero también de que esas opiniones queden en la esfera de los que desean lo imposible. Porque sostener que el mundo vive una crisis porque alberga a mil millones de hambrientos es, para ese aparato de poder, una tontería bienintencionada dicha por un “sempiterno idealista”, un dúo de palabras neutralizadoras que bajan de antemano la tensión de las palabras de Chomsky.

A nadie se le hubiera ocurrido tomar medidas drásticas contra el hambre. También es de pueriles y bienintencionados hablar de “seguridad alimentaria”, una noción que manejan los organismos internacionales como la FAO, pero que no operan sobre la realidad ni sobre los gobiernos. Mientras sean los excluidos los que pierdan la vida, no pasará nada. El problema es cuando los incluidos comienzan a perder sus bienes.

El periodista le comenta que para los políticos norteamericanos ya no es el terrorismo “la mayor amenaza mundial, sino la inestabilidad provocada por la crisis”. Y Chomsky replica qué sentido le dan los políticos norteamericanos a la palabra “estabilidad”: la subordinación a Estados Unidos. Quizá a eso se haya referido el jefe de la CIA cuando incluyó en su lista de países con riesgo de inestabilidad a Venezuela, Ecuador y la Argentina. “¿Qué ha hecho Obama para lidiar con la amenaza? Rodearse de gente que contribuyó a crear esta crisis, como Timothy Geithner, Laurence Summers, los banqueros, y encontrar una fórmula para rescatar el sistema que ellos mismos dominan y controlan.”

Otro cuadro cuelga en el despacho de Chomsky en el MIT: una imagen del ángel exterminador junto al salvadoreño cardenal Romero y los seis jesuitas que fueron asesinados con él en los ’80 por escuadrones de la muerte. “Uno de mis fracasos es que ningún norteamericano sepa qué significa ese cuadro.” Nunca lo sabrán. No saben lo que no les importa. No lo quieren saber. Así como los que en este país han reflotado el asunto de la pena de muerte. No quieren saber de la inseguridad de los otros, sólo de la propia y la de quienes se les parecen.

Esta semana, la farándula ha sido muy tenida en cuenta en los programas periodísticos. Moria Casán, Sandro, Carmen Barbieri y otros tantos con menos taquilla han salido a “sincerarse” y a “decir lo que piensa el pueblo” (como dijo Susana Giménez, a quien cuesta imaginársela sin atavío animal print y muchísimo más caminando por alguna calle de tierra). Moria Casán supo decir que no quiere ver pobres porque le descompensan la energía. Usan autos blindados y vidrios polarizados. No toleran que el barro salpique las burbujas de jabón líquido que son sus vidas. Pero, por lo visto, son perfectamente capaces de crear microclimas cuando los monopolios mediáticos abogan por el agite y por el “así no se puede seguir”.

El hambre sigue siendo un crimen todavía más flagrante en el país, cuya dirigencia rural es arengada por la oposición para que no acuerde, para que no pacte, para que no se calme. Hay crisis reales invisibles, y crisis talladas a la medida de unos cuantos canallas"

Yo te banco Gerardo. Ahh... y a Cristina también.

lunes, 9 de marzo de 2009

¿Y SI ÉSTOS NOS GOBERNARAN?


No hago más que reproducir algunos párrafos de una nota de Clarín:

"Ni alianza, ni concertación, ni frente cívico, ni convergencia. Los dirigentes de la Coalición Cívica y la UCR tienen claro cuales son las palabras que -por estar desgastadas ó vinculadas a otros espacios- no deben figurar en el nombre de su armado electoral. Pero les cuesta horrores consensuar uno que los identifique. Y el asunto disparó los primeros tironeos en la sociedad política.

La necesidad de encontrar una "marca" para la nueva construcción surgió a partir de la incomodidad que encontraban los propios negociadores para definirse. "¿Qué somos: la Coalición más la UCR, Carrió y Morales, la oposición no peronista?", le contó a Clarín que se interrogan unos y otros en las reuniones.

La salida fue consultar a expertos en márketing electoral. Acordaron pedir asesoramiento a consultoras políticas, entre ellas Poliarquía. Mora y Araujo y Analogías. Y la semana pasada se abrió un "concurso" de ideas, de la que participan conocidas agencias de publicidad, como Zorroaquín, Gowland y Persuasión.

Un creativo les recomendó llamarse ARCO, abreviatura de Argentina en Construcción. No les cerró. "Deja la pelota picando para que digan que nos van a llenar de goles", graficó un dirigente con pasión futbolera. Menos gustó la propuesta del logo, con los tonos del arco iris. "Identifica al movimiento gay", dijeron.

Provisoriamente le llaman confluencia, acuerdo ó armado. De todo menos alianza, por los malos recuerdos. Pero la sociedad entre lilitos y radicales sigue buscando una identidad. Casualidad o no, lo mismo le pasa al trío Macri-Solá-De Narváez"

Acá la nota completa

No está mal. Comenzaron por preguntarse: ¿Qué somos? El problema es que NUNCA lo sabrán, y si llegaran a gobernar no tardarían en preguntarse dos cosas: ¿Qué hacemos acá? y ¿Cuándo nos vamos?

sábado, 7 de marzo de 2009

NO ME GUSTA FACEBOOK ¿Y QUÉ?


Todavía varios incautos, que seguramente no conocen mi prédica anti-facebook de larga data (casi diría que fui un pionero en ello), me siguen enviando correos para ser “mi amigo” en Facebook.

Otros me lo dicen personalmente: ¿cómo puede ser que no estés en Facebook? Me explican que es una “herramienta imprescindible en el mundo de hoy”, o que gracias a Facebook se encontraron con amigos que no veían hace rato, o bien que les sirve para “chusmear” y ver “qué hacen los otros”, para tener “más amigos” o ser “invitados a fiestas o eventos”.

Y aquí es dónde juega un papel central la voluntad de ser igual a los demás, de no desentonar, de no diferenciarse. Y no tiene nada que ver con la clase social sino tal vez con algo más subterráneo, más visceral: un diferente es alguien que también está al margen, que no pertenece a ninguna parte y muchos no quieren exponerse a las consecuencias. Se trata, entonces, de “pertenecer”, de no quedarse sólo.


En una novela de ciencia ficción cuyo título no recuerdo, los marcianos habían conquistado la tierra y quedaba sólo un último reducto de defensores humanos asediado por fuerzas destructoras. En el último ataque el comandante dirigió una mirada de despedida a sus hombres, y se dio cuenta de que también ellos eran marcianos. Cierto. El postpensamiento triunfa y esto quiere decir que nosotros también estamos ya muy marcianizados. Así avanza y avanzará Facebook.

Hace poco, Facebook fue desmenuzado por Rudy en Sátira 12:

“La soledad es un tema del pasado, además de ser un tema de Spinetta. Ahora, para saber cómo es la soledad, tenés que estar sin compu, porque si no ¡el mundo es tuyo! Bueno... ¡No es tuyo, pero te lo prestan! ¿Y sabés por qué te lo prestan? ¡Porque son tus amigos, te quieren, asisten a tus eventos, te confirman, te dan toques, te mandan mensajes; abrazos, besos, y todo lo que se te pueda ocurrir, desde la virtualidad del ciberespacio!

Sí, lector, el mundo no es más La Tierra; el mundo ahora es el Facebook donde todos somos amigos y nos queremos mucho…

Y quizá la Historia deje de ser Historia y se transforme en eventos”


Mientras tanto, a la hora de disfrutar mi tiempo libre o tomarme una tregua de la vida, seguiré prefiriendo sentarme en la terraza de un bar a ver pasar la vida, para decir con Arturo Pérez Reverte: “Las terrazas de los bares son ojeaderos claves, atalayas imprescindibles a la hora de mirar despacio, sin prisa, intentando desentrañar los porqués de las cosas y de las gentes. Así que procuro utilizarlas. Entonces abro un libro, pido un café, y leo un rato levantando la cabeza entre página y página. Alguien que pasa, un modo de andar, una mirada, un gesto, unos zapatos, una sonrisa, pueden cobrar de pronto significados apasionantes y reclamar su propia historia, real o imaginada, estableciéndose misteriosos lazos entre lo que lees y lo que ocurre ante tus ojos”

En el medio, seguramente, me perderé de tener cientos de “amigos” en Facebook. A propósito, ¿Se puede ser “AMIGO” de 100, 200 o 1000 personas? ¿De qué sirve ese criterio absurdamente cuantitativo? La amistad se parece a la vida: lo que realmente sirve es la intensidad con que se vive. Todos sabemos que los auténticos amigos de una vida se cuentan con los dedos de las manos. Facebook, por esencia, propicia la banalización de la amistad.

Además, ¿Cuál es la utilidad de saber qué están haciendo “en este instante” mis 247 o 356 “amigos” o los eventos a los que asistirán? ¿Para qué carajo sirve integrar un “grupo facebook”, generalmente plagados de consignas facistoides y ridículas?


Y es que NO HAY MAGIA EN FACEBOOK, no hay poesía, no hay sensualidad. Y si no hay nada de eso, para mí la vida está en otro lado: también hay que encontrarle la poesía al presente, no solamente al pasado. Hay, sí, mucho puterío, mucho exhibicionista y muchos vouyer, mezclados con gente que tiene la sana y humana intención de sociabilizar.

No cuenten conmigo. Me gusta mirarle la cara a mis amigos, reír con ellos, putear y arreglar el mundo sentados frente a frente. O caminar, simplemente caminar. Me acordé de un cuento de Ray Bradbury que leí en mi adolescencia: El Peatón, del que reproduzco un fragmento:

Entrar en aquel silencio que era la ciudad a las ocho de una brumosa noche de noviembre, pisar la acera de cemento y las grietas alquitranadas, y caminar, con las manos en los bolsillos, a través de los silencios, nada le gustaba más al señor Leonard Mead. Se detenía en una bocacalle, y miraba a lo largo de las avenidas iluminadas por la Luna, en las cuatro direcciones, decidiendo qué camino tomar. Pero realmente no importaba, pues estaba solo en aquel mundo del año 2052, o era como si estuviese solo. Y una vez que se decidía, caminaba otra vez, lanzando ante él formas de aire frío, como humo de cigarro…


Leonard Mead dobló por una calle lateral hacia su casa. Estaba a una manzana de su destino cuando un coche solitario apareció de pronto en una esquina y lanzó sobre él un brillante cono de luz blanca. Leonard Mead se quedó paralizado, casi como una polilla nocturna, atontado por la luz.


Una voz metálica llamó:

_Quieto. ¡Quédese ahí! ¡No se mueva!

Mead se detuvo.

_¡Arriba las manos!

_Pero... dijo Mead.

_¡Arriba las manos, o dispararemos!

_¿Su nombre? dijo el coche de policía con un susurro metálico.

Mead, con la luz del reflector en sus ojos, no podía ver a los hombres.

_ Leonard Mead, dijo.

_ ¡Más alto!

_ ¡Leonard Mead!

_ ¿Ocupación o profesión?

_ Imagino que ustedes me llamarían un escritor.

_ Sin profesión, dijo el coche de policía como si se hablara a sí mismo.

La luz inmovilizaba al señor Mead, como una pieza de museo atravesada por una aguja.

_ Sí, puede ser así, dijo.

No escribía desde hacía años. Ya no vendían libros ni revistas. Todo ocurría ahora en casa como tumbas, pensó, continuando sus fantasías. Las tumbas, mal iluminadas por la luz de la televisión, donde la gente estaba como muerta, con una luz multicolor que les rozaba la cara, pero que nunca los tocaba realmente.

_ Sin profesión, dijo la voz de fonógrafo, siseando. ¿Qué estaba haciendo afuera?

_ Caminando, dijo Leonard Mead.

_ ¡Caminando!

_ Sólo caminando, dijo Mead simplemente, pero sintiendo un frío en la cara.

_ ¿Caminando, sólo caminando, caminando?

_ Sí, señor.

_ ¿Caminando hacia dónde? ¿Para qué?

_ Caminando para tomar aire. Caminando para ver.

_ ¡Su dirección!

_ Calle Saint James, once, sur.

_ ¿Hay aire en su casa, tiene usted acondicionador de aire, señor Mead?

_ Sí.

_ ¿Y tiene usted televisor?

_ No.

_ ¿No?

Se oyó un suave crujido que era en sí mismo una acusación.

_ ¿Es usted casado, señor Mead?

_ No.

_ No es casado, dijo la voz de la policía detrás del rayo brillante.

La luna estaba alta y brillaba entre las estrellas, y las casas eran grises y silenciosas.

_ Nadie me quiere ¾dijo Leonard Mead con una sonrisa.

_ ¡No hable si no le preguntan!

Leonard Mead esperó en la noche fría.

_ ¿Sólo caminando, señor Mead?

_ Sí.

_ Pero no ha dicho para qué.

_ Lo he dicho; para tomar aire, y ver, y caminar simplemente.

_ ¿Ha hecho esto a menudo?

_ Todas las noches durante años.

El coche de policía estaba en el centro de la calle, con su garganta de radio que zumbaba débilmente.

_ Bueno, señor Mead, dijo el coche.

_ ¿Eso es todo?, preguntó Mead cortésmente.

_ Sí, dijo la voz. Acérquese. Se oyó un suspiro, un chasquido. La portezuela trasera del coche se abrió de par en par. Entre.

_ Un minuto. ¡No he hecho nada!

_ Entre.

_ ¡Protesto!

_ Señor Mead...

Mead entró como un hombre que de pronto se sintiera borracho. Cuando pasó junto a la ventanilla delantera del coche, miró adentro. Tal como esperaba, no había nadie en el asiento delantero, nadie en el coche.

_ Entre.

Mead se apoyó en la portezuela y miró el asiento trasero, que era un pequeño calabozo, una cárcel en miniatura con barrotes. Olía a antiséptico; olía a demasiado limpio y duro y metálico. No había allí nada blando.

_ Si tuviera una esposa que le sirviera de coartada... ,dijo la voz de hierro. Pero...

_ ¿Hacia dónde me llevan?

El coche titubeó, dejó oir un débil y chirriante zumbido, como si en alguna parte algo estuviese informando, dejando caer tarjetas perforadas bajo ojos eléctricos.

_ Al Centro Psiquiátrico de Investigación de Tendencias Regresivas.


¿Será ese mi destino? Puede ser, nunca hice concesiones al mal gusto.

Mientras tanto, y a pesar de Facebook, el hombre seguirá siendo lo que es: el tortuoso y laberíntico impulso que lo induce a dibujar una vida que rara vez se parecerá a su proyecto de vida ni a su perfil de Facebook. Sólo viviendo nos conocemos. La vida nos delata. No Facebook.