miércoles, 24 de marzo de 2010

LA INSOPORTABLE LEVEDAD DE LA DERROTA


¿Se acuerdan como empezó esto? Se los recuerdo: con tibios cartelitos de Clarín Miente de hace ya 2 años, cuando empezaba el conflicto con las patronales rurales apoyadas por los monopolios mediáticos. Eran casi gestos de rebeldía adolescente ante un enemigo de una magnitud enorme: fue la piedra que dio origen a la intifada.

Por supuesto que desde allí no hizo más que tronar el escarmiento: “se ataca la libertad de prensa” fue el caballito de batalla que cayó derrotado con la nueva Ley de Medios. Hoy ni Nelson Castro, ni los muchachos de TN se atreverían a decir semejante pelotudez: saben que del otro lado hay demasiada gente que ya les picó el boleto.

Lo venía diciendo en el blog en múltiples post: la blogósfera y 6,7,8 eran enemigos que estaban preocupando demasiado a la corporación mediática, aunque en el fondo uno siempre tiene la duda de si no estará siendo demasiado optimista, si no estará influido por cierto microclima.

Hoy lo vi clarísimo, cuando la gente en la Plaza de Mayo cantaba “Noble, Magnetto, devuelvan a los nietos” ya no tuve dudas: PERDIERON. Y lo digo independientemente de quien sea que gane la elección presidencial en 2011: PERDIERON.



Puede parecer exagerado a primera vista lo que voy a decirles, pero lo que yo “sentí” estas últimas semanas, y empiezo a ver en mucha gente, es algo similar a lo que me tocó vivir en el colegio secundario cuando empezaba a caerse la dictadura: nos íbamos animando de a poco, así: con cartelitos, con cantitos, con el rock, hasta que terminamos todos juntos cantando en el patio del cole contra el Director facho y la p… que lo parió.

Esta columna que Joaquín Morales Solá publica hoy me hizo acordar al discurso de las autoridades educativas (hablo de un colegio universitario) que sabían que se les venía la noche y que encima tenían en frente a un montón de pendejos “irrespetuosos” que, de golpe, casi inexplicablemente para ellos, les habían perdido el miedo.

Te tengo una mala noticia Joaquín (aunque es probable que ya lo sepas): perdiste hermano, tu aura de pluma respetable se fue al carajo, al igual que tus vaticinios de tormentas perfectas. Los únicos que te toman en serio son los de la tribuna propia… y eso es poco… poquito para “el mejor periodista del año 2009” según la revista Noticias.

Les dejo para el final el brillante análisis que Gerardo Fernández realizó sobre estos fragmentos de la columna de Morales Solá, que nos dice hoy en La Nación:

“La prensa argentina padece desde hace bastante tiempo los estragos del rumor con mucha más fuerza que la bala perdida del agravio. ¿Los periodistas somos meros mercenarios a sueldo, dispuestos a describir el improbable sol de la noche sólo por un salario? ¿Las empresas periodísticas son demonios sueltos entre gente incauta, que defienden nada más que intereses corrompidos? El kirchnerismo ha tenido la astucia (sumada a los recursos y a las complicidades) de amplificar ese debate más de lo que se cree.

El tema es recurrente en tertulias de bares, en mesas familiares y en reuniones de amigos. Tal vez el éxito más importante del kirchnerismo haya sido esa capacidad inédita en los últimos 26 años de democracia de descalificar a sus adversarios reales o imaginarios. Esa situación cumple con el protocolo de un gobierno que llevó las naturales disputas por el poder a las entrañas de la sociedad, hasta fragmentarla entre amigos y enemigos"


Hay un renglón que desnuda la real preocupación del establishment y es este:


“El tema es recurrente en tertulias de bares, en mesas familiares y en reuniones de amigos.”


Evidentemente están preocupados. Ya no pueden tapar el sol con las manos y mucho menos seguir negando que la gran virtud del kirchnerismo fue que la sociedad comenzara a mirar a los medios como empresas que se mueven por intereses bien concretos y a los periodistas como escribas que a la postre reportan, como cualquier asalariado, a sus patronales respectivas.

Un tema para estudiar con detenimiento es lo que se desprende de este párrafo que está casi al final de la nota:


"Hay ahora otro acceso hacia la descalificación del periodismo. Lo promueve Internet. Nunca el periodismo fue tan eficaz ni tan rápido. Sin embargo, esa horizontalidad de la comunicación, ese milagro de la modernidad tiene un aspecto oscuro. "Una parte de la Web es una cloaca de psicópatas anónimos", escribió hace poco Jorge Fernández Díaz. ¿Algunos psicópatas disfrutan también de subsidios oficiales?"


Poco a poco los grandes medios están poniendo la mira en la blogosfera. Hay que seguir con mucho tino e inteligencia estos señalamientos porque existe la posibilidad que en algún momento se desate una verdadera campaña. Curiosamente se encuentran con un gran obstáculo y es que cada vez que hablan de los blogs multiplican en progresión geométrica sus lectores.


Y es sabido que si hay un lugar del que no se vuelve es de la blogósfera Nacional y Popular.


Acá la nota completa de Gerardo en Tirando al Medio.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Aldo, leí tu nota y también la de Gerardo. Quiero creer que el multimedio Clarinesco y los otros multimedios que comparten sus mismos intereses, están perdiendo. Noto en la gente común un descreimiento incipiente en los medios de comunicación masivos, pero lo que me preocupa es el saber que hay muchísima gente a la que no le interesa un carajo ni la manipulación mediática, ni los temas políticos ni nada que no sea la pelotudez tinellesca o su propia situación individual. Mientras estas franjas de la sociedad permanezcan en esa tesitura y no se den cuenta de la importancia que la política tiene sobre sus vidas, no sé si habremos conseguido una victoria duradera que permita consolidar el modelo implementado desde el 2003 hasta hoy.

SAludos,
JP

Aldo Ulises Jarma dijo...

JP: es cierto lo que dices. Sin embargo, fijate el detalle: lo que yo digo es que el monopolio Clarín perdió, no que nosotros ganamos.
Para que el kirchnerismo pueda ganar en el 2011 tiene, creo, un largo y duro camino con algunas posibilidades de éxito.
Pero Clarín ya perdió: perdió su credibilidad en los sectores que antes compraban el diario para leer de política y casi no ponían filtros personales.
Ahora son muchos los que no lo compran y el que lo hace pone todos sus filtros en la lectura sabiendo de quien viene el dato.
Las masas despolitizadas que compran Clarín por la parte deportiva o de espectáculos no contribuyen NUNCA, en absoluto, a ganar la batalla por el "sentido común" de la sociedad.
Y esa la están perdiendo... y vaya cómo...

timoneldetormenta dijo...

Si yo noto un fastidio generalizado en los consumidores de Clarín, que en mi medio social son mayoría. Ahora eso no se manifiesta en una mirada más complaciente o condescendiente con los Kirchner, hasta te diría todo lo contrario. Lo que escucho es; son todos la misma mierda, a mi me desilusionaron al final son todos iguales. Es decir "los políticos". Ese es un pensamiento que además de expresar una pereza intelectual importante termina siendo muy peligroso. No se cual será la salida para toda esta gente que sacando algunos en su gran mayoría no es gente jodida.