miércoles, 14 de julio de 2010

CRONICA DEL MUNDIAL DESDE ESPAÑA: DEL LLANTO A LA ALEGRÍA


Nadie mejor que un argentino residente en España hace más de 30 años para "sufrir" este mundial de Sudáfrica. Fibrilatus recién pudo recuperarse de sus emociones fuertes y nos manda su crónica desde la catalana y románica Tarragona:

Ya sé que se ha escrito mucho (y mejor que yo) sobre el Mundial 2010. Sin embargo, quería aportar mi granito de arena como argentino residente en España, tanto en el dolor que aún persiste por Argentina (el “llanto” ) como en la paradoja de estar reconfortado por España (la “alegría” del título). Como el fútbol es un juego sencillo y cargado de sentimiento, lo confieso: YO (al igual que millones de argentinos) TAMBIÉN SOY D.T. DE LA SELECCIÓN.

Asumiendo mi parte de arrogancia (como Diego) el resultado final no me sorprendió (sólo hace falta leer mis post del 30-06-08 “Fibrilatus vivió a pleno la Eurocopa y del 31-05-09 “Durmiendo con el enemigo”), dónde puede adivinarse la previsible supremacía de España como selección y la característica de este campeonato: preeminencia del juego colectivo, poca relevancia de las figuras, el equipo como un fin en sí mismo, etc.. etc..

Debemos reconocer algunas cosas: a pesar de los comentarios semiracistas Sudáfrica ha cumplido con la organización y nos deja un recuerdo (el de las pesadas vuvuzuelas). Es de esperar que también países como Egipto, Libia o Marruecos estén plenamente capacitados para organizar un Mundial en un futuro próximo. El nivel futbolístico, globalmente, fue pobre: los equipos asiáticos siguen como siempre, los africanos han retrocedido (sólo Ghana mantuvo el tipo), los americanos cumplieron (destaco a Uruguay que defendió con honor al sur del continente y a México al norte), mientras que los europeos se repartieron la parte más deseada de la torta.

Me alegré, sinceramente, por la escandalosa eliminación de Francia, Italia e Inglaterra. Venían, como siempre, a comerse el mundo y les pasó lo que les pasó. Creo que les queda mucho más trabajo a hacer que a nosotros: simplemente porque no tienen nada (ni viejos, ni jóvenes promesas, ni figuras para el liderazgo). Brasil parece ser una sorpresa (siempre es un sorpresa eliminar a Brasil), pero no lo fue tanto para mí. Recuperado Robben era temible porque ya demostraron un gran progreso en la pasada Eurocopa y aposté por Holanda contra los desnaturalizados brasileños (acerté más que el pulpo de mierda), y Dunga fue peor que Maradona. Alemania ya había llegado a la final de esa Eurocopa y había perfeccionado su alineación (Balack, que se creía Dios, se lesionó) y su estilo. Tenía que estar cerca del título por pura lógica y merecimiento. España tenía que llegar siempre que la dejase Argentina (en realidad, nos temían más a nosotros que a los alemanes en el cruce). Se portó como su nivel se merecía: a pesar de su evidente falta de gol (Del Bosque cometió un solo error: convocar y hacer jugar a un Torres demasiado alejado de su nivel tras la reciente lesión. Sumado que ,exceptuado Villa, España no tiene más delanteros puros de nivel), lo suplió con sacrificio, oficio, pundonor y un estilo de juego ya automatizado. También no marcó más porque ya era conocida: todos sabían cómo jugaba y que era peligrosa, por lo tanto nadie le jugaba francamente al ataque (ni siquiera Alemania, que jugó con “cobardía” táctica contra España). A cambio, ¡lo que cuesta también meterle un gol! Y, en todo caso, banco a España hasta la muerte porque se merecieron el triunfo, porque conozco a sus jugadores, porque compartí una inmensa alegría (a pesar del llanto y dolor que llevaba dentro) con mis amigos españoles, porque soportaron gran cantidad de juego sucio (¿se imaginan las crónicas si las patadas holandesas hubieran sido uruguayas, paraguayas o argentinas?), porque soportaron a un referee inglés ( ya empiezan a saber aquí lo que es un holandés pateando y tener un referee inglés) y, sobre todo, porque NOS VENGARON. Y haciendo un partido memorable.




Los argentinos de aquí no esperábamos gran cosa de nuestra selección. Con la fase eliminatoria agónica, todos lo veíamos muy negro. Divididos (como el país) al 50% entre pro y contra Maradona, vista la lista de jugadores (excelente delantera, dinosaurios en la defensa, centrocampistas veteranos o dudosos), estábamos cagados de miedo y preparados para el ridículo. Hasta Corea del Sur nos parecía una selección con solera y temible. Sin embargo, en la fase de grupos (al igual que el país) nos fuimos entusiasmando: los delanteros son letales, Messi juega bien aunque no mete goles, la defensa aguanta el tipo, vemos a Verón y Mascherano bien, Heinze/Samuel/Demichelis sacan la lengua al minuto 47 de partido, giran más lento que un tren pero aguantan el tipo: ¡a la mierda, SÍ QUE PODEMOS, se trata de meter un gol más que los demás! Y llegó el partido con México. El partido mal leído por Maradona. Un gol temprano ilegal que deja atontado y caliente a los mexicanos (¡qué determinante ha sido en este Mundial meter el primer gol!), ganamos sí. Pero ya vimos detalles de perdición: la defensa hace aguas, no hay transición entre defensa y ataque, delanteros letales defendiendo en nuestro campo, Messi aislado haciendo de “constructor”, etc…. que luego Alemania llevaría estas evidencias a la máxima expresión.

Todos preocupados, pero Ariel el optimista sostenía: “Pondrá a Pastore”, “Despertará Di María”, “Adelantará a Messi”. Leandro el pesimista más lacónico: “Alemania nos romperá el orto”. Acertó. Que dolor más profundo, sentido y nada aliviaba (o quizás, exacerbaba) el vivirlo en grupo. Alemania (más allá de las circunstancias del partido que condicionó mucho) nos barrió. ¡ Higuaín supliendo a Otamendi!. Teníamos lo más preciado y difícil de tener: una delantera excepcional. ¿Se imaginan a Higuaín o a Agüero apoyando a un Forlán, a un Villa, a un Robben…..?. Los amigos españoles nos decían que a Messi le faltaba Xavi e Iniesta, y nosotros, en un arrebato de orgullo soltábamos que quizás, pero que ¡ a Xavi e Iniesta, les faltaba Messi!. Se equivocó Maradona: si tienes lo más preciado que son los delanteros de gran pegada, tienes que empezar a armar el equipo desde atrás.

Nuestro arquero fue correcto pero no hizo ninguna atajada “heroica” determinante tipo Casillas, la defensa lenta, previsible, torpe y cansada ya en el minuto 65 (tampoco hacía falta tanto: los uruguayos se defendieron muy bien con rapidez, lucha y sacrificio. No había ningún famoso). El centro del campo con Mascherano loable, Verón correcto pero también veterano (¿se imagina alguien a Heinze o Verón jugando una prórroga?), Di María desconocido………. Quizás Pablo tenía razón cuando opinaba que nos hubiese venido bien perder o empatar un partido en la fase de grupos para detectar y corregir defectos. En fin. Creo que es parte del trabajo a realizar: honrar a Samuel, Heinze, Demichelis, Verón, Palermo, Tévez y decirles adiós. El futuro llama: quizás los Burdisso, Pareja, Benega, Milito como central…

Diego: seguro que hay gente.¡ Puedes probar 108 jugadores más si hace falta!. También nos dolía (quizás como a Diego) el desamor por Messi. Todos los que estamos aquí éramos conscientes de la ansiedad, del cariño de Messi hacia la Selección. No sé si se sabe allí, pero la AFA no lo convocó para el seleccionado juvenil hasta que se enteró que la Selección española le pidió jugar y él rechazó. Seamos justos: es el mejor jugador del mundo haciendo las cosas dónde él es determinante. Pero no es Maradona ni lo será. No seamos ingratos: nadie lo discutía cuando fue Campeón Olímpico. Coincidimos aquí en que Maradona puede valer. Podemos ver qué hace en la Copa América: ya no debe nada a los veteranos, debe buscar futuro. Nadie sabe más de fútbol que él, pero quizás sí necesita mejor asesoramiento táctico para montar un equipo desde atrás y saber aprovechar nuestros delanteros (ningún equipo tiene gente con la talla de Messi, Higuaín y Agüero juntos).

Yo viví la debacle con Holanda en 1974. Sólo ese evento, la pérdida de la final con Alemania en el 90’ y la actual derrota me produjeron tanto daño. Pero levantamos cabeza como equipo en el 78’, sin necesidad de copiar a nadie, sin necesidad de inventar nada, sin renunciar a nuestro estilo y tradición………. Pero recuerdo a Menotti ojeando jugadores incluso en el Club de Fútbol de Ledesma (un pueblo perdido en Jujuy), sacó a Villa formado en Atlético de Tucumán, etc…. o sea que hay remedio y es posible. Dejemos un margen, dejemos un tiempo de ensayo-error, dejemos un tiempo de prueba. Exijamos un buen papel (aunque no ganemos) en la Copa América y preparémonos para el Mundial de Brasil. Vayamos con humildad, jugando más y hablando menos, digamos que todos los equipos son buenos y difíciles (aunque sea el de Malta), conozcamos mejor a los adversarios (sabremos quién es Mueller), presionemos a la AFA para que jueguen más veces y se conozcan mejor nuestros jugadores, aprendamos algo de Del Bosque o de Guardiola sin necesidad de perder nuestra esencia o personalidad…….. Aquí tenemos fe y confianza y ya hemos empezado a soñar...

Como soñamos no somos mediocres: ¿se imaginan ganarle en la final a Brasil en su propio estadio como hizo Uruguay en 1950?

Fibrilatus.

2 comentarios:

Dy dijo...

quedate en Spain, Fibrilatus

Pablo dijo...

lo bien que haces en vivir en españa!! Más aún, lo bien que hacés en vivie en cataluña!! Quedate por alla nomás