Al fin y al cabo, tiene donde cifrar sus esperanzas: cuando lo llevaron a upa preso a este estanciero por el delito de cortar rutas nacionales, un gran sector de la clase media argentina se sumó a la clase alta en un importante cacerolazo para reclamar por "la represión".
Ayer la ciudad de Córdoba se sumergió en la violencia como pocas veces se ha visto, con un saldo de 20 heridos y una decena de detenidos entre trabajadores de gremios estatales y jubilados que reclamaban contra la reforma jubilatoria que llevó adelante el Gobernador Schiaretti. El ex candidato a Gobernador Luis Juez afirmó: "a la provincia la quebraron De La Sota y Schiaretti".
Ante esta situación, la clase alta de Recoleta, Palermo y un sector de la clase media volvieron a la normalidad: esta causa (una auténtica represión a sectores populares) no ameditaba salir a cacerolear ni movía a los multimedios a generar el malhumor colectivo.
Como dijo De Angeli: "Le vine a dar las gracias a Cobos por pacificar el país". Amén.
1 comentario:
Che, me imagino la calentura de Cristina... Y de Néstor!!!!!
Los cagó UN NABO !!!!!!!
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