COMO DIOS MANDA 2

Ya mostramos en este blog que para Rajoy la política económica debe ser "como Dios manda". Ahora les dejo la contestación que en su momento le dedicó Zapatero:

Al margen de la aguda ironía (bastante escasa en él, por cierto) de que hace gala Zapatero, lo realmente preocupante es que Zapatero confiesa su impotencia: "No es que no hicimos nada... pusimos 20 medidas en marcha". Como fueron un fracaso, sale a pedirle UNA idea a Rajoy.

Todo un resumen de una clase política atravesada por sus compromisos con bancos y multinacionales y que, por lo tanto, nunca tomarían ni una sola medida contra las corporaciones. No sólo porque no tienen las pelotas suficientes, sino también porque están colonizados ideológicamente por una extensa promiscuidad de negocios entre clase política y élites empresariales.

Ninguno de ellos tomará una medida rupturista de ese "sistema de relaciones" que no sólo incluye la famosa puerta giratoria para los políticos que dejan el gobierno para ser empleados de las empresas que antes beneficiaron, sino también el liso y llano "empleo" de los cuadros políticos del PP y PSOE en ese entramado político - empresarial. Pisarían demasiados callos.

Por eso resulta un ejercicio hasta divertido (lo dramático es que hay pueblos por detrás) ver como estos psicópatas del mercado y la austeridad se limitan a observar con perplejidad el desmoronamiento del neoliberalismo y sus sistemas de creencias y relaciones.

Esto último no lo digo yo ehh... lo dice el mismísimo diario El País de España que describe a Rajoy como "el presidente perplejo" en estos términos:

"Cuatro meses después de haber celebrado unas elecciones y de haber concedido la mayoría absoluta al Partido Popular y a su presidente, Mariano Rajoy, la sociedad española, según todas las encuestas, está profundamente desanimada y desconfiada. La avalancha de medidas de austeridad y recorte impulsadas por el Gobierno, con una grave repercusión social, no ha conseguido aportar algo de calma a los inversores extranjeros, y las malas noticias sobre la situación económica y financiera, el paro, por encima de los cinco millones y medio de personas, y la profundización de la depresión abruman a los ciudadanos. Día a día comprueban todo lo que es capaz de ir colocando sobre la mesa Mariano Rajoy para recuperar la confianza de los mercados sin que esa esperanza se traduzca en hechos y no en meros instantes de alivio.

Quienes le conocen creen que Rajoy está sinceramente sorprendido por la falta de apoyo que encuentran sus medidas en los mercados internacionales y por la extraordinaria presión, sin respiro, a que someten a España.

Así que algunos políticos populares intentan animar al presidente a reconsiderar su aislamiento y a mantener una mayor presencia fuera de las obligadas y esporádicas sesiones parlamentarias. “Rajoy es un conservador en sentido estricto, con aversión al cambio. Alguien que ha creído siempre que por no hacer nada, nunca pasa nada. Y se ha hecho cargo del país en medio de la peor crisis desde la democracia, en un escenario que le exige continuos cambios y, sobre todo, a una velocidad endiablada. Lo contrario a su naturaleza”, explica un político popular que trabajó a su lado en el partido y que es poco optimista sobre la posibilidad de que Rajoy cambie sus modos políticos y acepte una mayor proximidad a los ciudadanos"

Todo el artículo va en el mismo sentido: Estamos jodidos, con este inútil no llegaremos a ningún lado, parecen darse cuenta ahora.

Reflexión final: la importancia central de la política y la voluntad de cambio, de dar pelea con coraje y decisión.

Néstor Kirchner llegó al poder con el 22 % de los votos y construyó su legitimidad a base de comprometerse con el pueblo y darle pelea a las corporaciones y el F.M.I., con endiablada heterodoxia en la praxis política.

Este inútil de Rajoy llegó con mayoría absoluta en el parlamento y sólo "demuestra coraje" para vanagloriarse ante los mercados y  las corporaciones en éstos términos:

“Soy yo, y es este Gobierno, el que puede hacer aprobar en el Parlamento, sin dudas ni temores, las medidas de ajuste que se vayan considerando necesarias, según vaya evolucionando la situación”

Pobre pueblo español...