miércoles, 18 de agosto de 2010

ESPERANDO LA CARROZA


La nota del diario La Nación pintaba interesante desde el título mismo: "Inquieta a la iglesia el alejamiento de la sociedad" Escrita por Mariano De Vedia, una suerte de autoridad de La Nación a la hora de tratar la temática eclesiástica, la nota promete desde el principio mismo:

Cómo enfrentar la distancia que hoy separa a la Iglesia de la sociedad es el nuevo desafío que se plantearon los obispos, al comenzar ayer una reunión de tres días, un mes después de sancionada la ley que autorizó el matrimonio entre personas del mismo sexo.

"La vigencia de la ley plantea renovados desafíos a la Iglesia: la forma de afrontar esta nueva realidad en la educación, particularmente en los colegios católicos, con los docentes y con los alumnos. Y, también, cómo manejar el tema en las propias familias", confió a La Nacion el padre Jorge Oesterheld, vocero de la reunión episcopal, en la que se percibieron signos de autocrítica

No me digan que no pinta bien la cosa… veamos como sigue:

“El debate interno se orientó hacia la necesidad de encontrar fórmulas que permitan a la Iglesia sostener sus posiciones y estrategias sin renunciar a la doctrina ni a sus convicciones, pero con un lenguaje renovado, adaptado a los nuevos tiempos y circunstancias”

Aquí fue dónde ya me pregunté: ¿Entendí bien? ¿Todo pasa por renovar “el lenguaje”? Sigamos con la nota:

"Hay que trabajar con los jóvenes. Son muchos los que comulgan con los valores cristianos y debemos hablarles con su propio lenguaje. Tienen que recibir el mismo contenido, pero adecuado a las nuevas formas y los nuevos tiempos", reveló ayer a LA NACION un dirigente católico.

Increíble pero real: para no estar tan alejados de la sociedad, sólo planean “modificar el lenguaje”. Algo así como la fase superior del gatopardismo eufemístico. Pero, eso sí, destinado a los jóvenes!

4 comentarios:

Vincent Vega dijo...

me parece que van a empezar a usar el Facebook y el Twitter

ram dijo...

Tuvimos una vecina que, ya anciana, aún insistía en mantenerse bien arreglada y maquillada - claro, el resultado no se veía bien, esta buena señora junto con los años se ganó una casi ceguera que le impedía percibir los desastres que se hacía en la cara. Estos curas están así, ciegos (pero de dogmatismo) creen que se arregla con maquillaje, lo que es irreparable, la sociedad es otra y cada día que pasa los incluye menos y lo bien que hace.

Anónimo dijo...

Además del Facebook y el Twitter usarán SMS. Muchos obispos piensan dar misa con ritmo hip-hop, otros se han apuntado al reggae. La mayoría ya van con patines......
Ahora bien, de preocuparse de los problemas reales, de incidir en las desigualdades sociales, de eso: nada.
Al fin y al cabo lo de la "Teoría de la Liberación" es demasiado anticuado para este Papa.


Fibrilatus.

Aldo Ulises Jarma dijo...

Ram: gracias por tu anécdota tan oportuna.
Vincent Vega y Fibrilatus: gracias por los aportes.
Abrazo.