Uno lee al Morales Solá de hoy, y dan ganas de salir corriendo a alcanzarle un pañuelo. Comienza su columna con este párrafo:
"El radicalismo se está quedando solo. A las severas condiciones que le puso Elisa Carrió se les sumó ayer una sorprendente declaración progubernamental del más importante dirigente socialista, el gobernador Hermes Binner. Así, el mandatario santafecino tomó distancia, tal vez definitiva, de sus hasta ahora socios en el Acuerdo Cívico y Social. El peronismo disidente no sólo carece de un referente inconfundible y de reglas básicas para la toma de decisiones; tampoco se ha puesto de acuerdo sobre dos cuestiones básicas: si lo tendrá a Mauricio Macri entre sus presidenciables y cómo y cuándo definirá su candidatura presidencial"
Y termina con este:
"Nadie sabe, en realidad, cómo será el cercano día de mañana entre los jirones de alianzas opositoras que, en algunos, ya han sido"
La misma ternura me produce este análisis económico de Juan Llach, quien empieza así:
"Parecería que nada más debería pedirle la política a la economía. El PBI crecerá 7,5%, el clima llevó la cosecha de granos cerca del máximo histórico, muchas industrias producen como nunca, el consumo vuela, proliferan los nuevos propietarios de autos, electrodomésticos y computadoras, y la recaudación bate récords y baja el riesgo país"
Así culmina Llach su análisis económico:
"... la Argentina cumplirá en 2010 nueve años sin un derrumbe macroeconómico, acercándose al récord de 1963 a 1974, y esto es muy bueno para el país, para la democracia y para los más pobres, siempre los que más sufren esas catástrofes. El marco mundial favorable centrado en los países emergentes puede durar aún un par de décadas, por lo que habrá nuevas oportunidades de lograr un desarrollo integral y sostenible sin pasar necesariamente por un nuevo trauma. Por ello es difícil que la campaña electoral de 2011 esté centrada en el problema económico, salvo en el caso de la inflación, que sí será protagonista. En parte será así porque las generaciones futuras no votan o no tienen información completa sobre los costos que les acarrearán las actuales políticas. Por ejemplo, los más jóvenes no han vivido los dramas nacionales con la inflación. Ante un Gobierno que esgrimirá sólo la cara complaciente de esta economía fantástica, la oposición se las deberá ingeniar para mostrar que es posible un futuro verdaderamente mejor en lo económico, pero también en lo político y en lo social"
"El radicalismo se está quedando solo. A las severas condiciones que le puso Elisa Carrió se les sumó ayer una sorprendente declaración progubernamental del más importante dirigente socialista, el gobernador Hermes Binner. Así, el mandatario santafecino tomó distancia, tal vez definitiva, de sus hasta ahora socios en el Acuerdo Cívico y Social. El peronismo disidente no sólo carece de un referente inconfundible y de reglas básicas para la toma de decisiones; tampoco se ha puesto de acuerdo sobre dos cuestiones básicas: si lo tendrá a Mauricio Macri entre sus presidenciables y cómo y cuándo definirá su candidatura presidencial"
Y termina con este:
"Nadie sabe, en realidad, cómo será el cercano día de mañana entre los jirones de alianzas opositoras que, en algunos, ya han sido"
La misma ternura me produce este análisis económico de Juan Llach, quien empieza así:
"Parecería que nada más debería pedirle la política a la economía. El PBI crecerá 7,5%, el clima llevó la cosecha de granos cerca del máximo histórico, muchas industrias producen como nunca, el consumo vuela, proliferan los nuevos propietarios de autos, electrodomésticos y computadoras, y la recaudación bate récords y baja el riesgo país"
Así culmina Llach su análisis económico:
"... la Argentina cumplirá en 2010 nueve años sin un derrumbe macroeconómico, acercándose al récord de 1963 a 1974, y esto es muy bueno para el país, para la democracia y para los más pobres, siempre los que más sufren esas catástrofes. El marco mundial favorable centrado en los países emergentes puede durar aún un par de décadas, por lo que habrá nuevas oportunidades de lograr un desarrollo integral y sostenible sin pasar necesariamente por un nuevo trauma. Por ello es difícil que la campaña electoral de 2011 esté centrada en el problema económico, salvo en el caso de la inflación, que sí será protagonista. En parte será así porque las generaciones futuras no votan o no tienen información completa sobre los costos que les acarrearán las actuales políticas. Por ejemplo, los más jóvenes no han vivido los dramas nacionales con la inflación. Ante un Gobierno que esgrimirá sólo la cara complaciente de esta economía fantástica, la oposición se las deberá ingeniar para mostrar que es posible un futuro verdaderamente mejor en lo económico, pero también en lo político y en lo social"
A ver los muchachos de Pagina 12, Miradas al Sur y Tiempo Argentino si se ponen las pilas que la competencia con La Nación se está poniendo jodida.
6 comentarios:
De yapa si Ud lee La Nacion de hoy
publican una nota donde señalan
a Cristina como LA POLITICA MAS LINDA DEL PAIS
Estan entregadisimossssssssssssssssss
¿Pero no es suficiente con Escudé, Franco Macri, Blaquier, Sarlo ayer, que hoy tenemos que bancar que Juan Llach diga que las cosas están marchando sobre rieles?
En cualquier momento bajamos la persiana de la blogósfera si estos tipos siguen bancando al gobierno. ;)
muy bueno el final... ajajja
Jajaja Increible!!
si no fuera por vos, ni me entero q dice la Nación..
Saludos Cumpa!
Ahora entiendo porque fue al Senado a decir "Tengo miedo". Cláh..., miedo a que vuelva a ganar K.
¡Mañeto, ríndete y tendrás un huício hústo!
hay que leer algunos de los comentarios que dejan los lectores asiduos de la nación. pobres tipos, les mienten con toda la fuerza por dos años y ahora piden que les sigan mintiendo.
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