jueves, 11 de octubre de 2012

DESIGUALDAD Y CRECIMIENTO



Hace exactamente una semana, Nicholas Kristof nos decía en el diario New York Times:
"Imaginen un jardín de niños con 100 estudiantes, abastecidos generosamente con libros, crayones y juguetes.
Pero, incluso así, sueltan un grito ahogado: un avaricioso niño está vigilando celosamente una montaña de juguetes para él solo. Un puñado de niños juega tranquilamente con unos cuantos juguetes, al tiempo que 90 de los niños tienen expresión de tristeza: están con las manos vacías.
¡El codicioso niño ha acumulado más juguetes que esos 90 niños juntos!
“¿Qué está pasando?” usted pregunta. ¡Aprendamos a compartir! ¡Un solo niño no debe tomar todo para él solo!"
El niñito codicioso le dirige una mirada, indignado. “¿Usted cree en la redistribución?” le pregunta con recelo, sus labios apretados en señal de desprecio. “Yo no quiero compartir. ¡Estamos en Estados Unidos!”
Y después manda llamar a su empresa de seguridad privada y hace que lo saquen a usted a rastras de las instalaciones. Bien, quizá no, pero usted entiende el punto.
Esa distribución del jardín de niños es precisamente lo que parece Estados Unidos. Nuestra riqueza se ha vuelto tan distorsionada que el 1 por ciento superior posee una valía colectiva mayor que la totalidad del 90 por ciento del fondo, con base en el Instituto de Política Económica en Washington.
Esta desigualdad es un desafío central para Estados Unidos actualmente y debería estar captando mucha más atención en esta campaña presidencial. Unas cuantas instantáneas:
- Los seis herederos de Sam Walton, el fundador de Wal-Mart, poseen tanta riqueza como los 100 millones de estadounidenses de menores ingresos.
-Noventa y tres por ciento de la ganancia en ingreso nacional fue al uno por ciento superior en 2010.
- El coeficiente Gini de Estados Unidos, la clásica medición de desigualdad, fijó una marca moderna el mes pasado: la mayor desde la Gran Depresión"

Acá la traducción al español del artículo completo.

No son observaciones novedosas, ciertamente. Pero lo sintomático es cómo ahora se reiteran y causan genuina preocupación. Hace un par de meses, por ejemplo, en el mismo diario New York Times, Eduardo Porter decía esto:


"Hay algo que decir a favor de los sistemas de salud universales. Cuando mi hijo tuvo una urticaria en unas vacaciones en Liguria, en Italia, el mes pasado, el farmacéutico me indicó que viera al médico, un piso más abajo, que diagnosticó el problema sin cobrarme y me despidió con un apretón de manos y un chiste sobre su hija, que estudia medicina en la Universidad de California, en San Diego.
Italia podrá estar metida en un lío, con una economía en caída y una alta tasa de desempleo, pero Estados Unidos tiene mucho que aprender de ellos. Los italianos viven más. Su tasa de pobreza es mucho más baja. Y si pierden el empleo pueden recurrir a una red de seguridad social más generosa.
Estados Unidos, que se cuenta entre los países más ricos, tiene fallas en cosas importantes. Tiene las tasas más altas de pobreza y de mortalidad infantil entre los países desarrollados. Siendo hasta hace poco uno de los más educados del mundo, hoy está quedando atrás.
Los políticos en Washington saben que enfrentamos una crisis fiscal de largo plazo. Para 2020 se prevé que 70 millones de estadounidenses dependerán de la seguridad social comparado con 45 millones en 2000. Las filas de los que usan Medicare llegarán a los 64 millones, comparado con 40 millones en 2000"

Hoy la cosa va más allá aun: la conservadora revista The Economist lleva la tapa que ilustra este post y, en su artículo central, tiene frases como ésta: "La política moderna tiene que someterse a una reinvención para encontrar formas de mitigar la desigualdad sin afectar el crecimiento económico. Ese dilema ya se encuentra en el centro del debate político, pero en su mayoría no produce calor, luz.

¿Se entendió? Lo reitero: ENCONTRAR FORMAS DE MITIGAR LA DESIGUALDAD SIN AFECTAR EL CRECIMIENTO ECONÓMICO. ¿Les suena? Es, justamente, lo que se viene practicando en Argentina, con bastante éxito, desde 2003.
Para The Economist, la política moderna tiene que marchar hacia allí. En Argentina, la incorregible oposición, persiste en seguir la agenda de Clarín...

1 comentario:

Anónimo dijo...

El articulo, es..., impecable, desde el punto de vista del mensaje que quiere transmitir: la equidad ! Pero lo terminas mal, cuando buscas la argumentacion de que en Argentina, la k esta haciendo bien, bajando el ramito de naranjas, para que el niño las agare...! Y terminas peor: tentando, como la k, argumentar que la oposicion, quiere seguir clarin ! Tipico discurso demagogo-populista ! Aldo ! Tenes conocimientos juridicos suficientes, como para saber, reconocer y publicar, que la actitud k, en el hecho de bajar los ramitos de naranjas, para que los menos posibilitados las puedan agarrar, es un hecho totalmente demagogo-populista ! Si fuese autentico, la cantidad de subsidiados, ya estaria suficientemente auto-capacitados, para vivir del propio trabajo, dejando el subsidio...! Si la k fuese una estadista de ley, ya habria promovido el crecimiento, no con nacionalizaciones fayutas de empresas, sino con inversiones productivas ! Vamos Aldo ! La inflacion, si la k valiese verdaderamente como gobernante equitativa..., ja estaria dominada ! Porque todos saben, y vos mas que naides..., que inflacion, es impuestazo ! Que paga, quien menos puede ! Y que frena ! No es clarin y ni la oposicion, el grave problemazo de la Argentina ! Es la demagogia-populismo, ya encaramados de tal modo en los huesos de la pobre Argentina, que... ni la oposicion, ni el ciudadano conciente, se dan cuenta ! Y los secuaces de la k..., menos !
Tenes alguna argumentacion..., pero valida !, que justifique, que la Argentina, esta sometida a la demagogia-populismo, por mas de..., 150 años ? Solo la ignorancia lo justifica !
O la pre-meditacion ?
Que los USA, estan sentados en un problemazo..., eso es indiscutible ! Pero con la ACTITUD que los caracteriza, lo van a solucionar ! En cambio en Argentina, buscando SIEMPRE disculpas y culpados..., las crisis, solo se renuevan; como desde 1820 !