jueves, 11 de noviembre de 2010

EL FIN DEL PERONISMO DE MAUSOLEO

Cuando Néstor Kirchner era presidente, allá por el año 2005, definió al sector bonaerense que solía liderar Eduardo Duhalde como "peronismo de mausoleo". 
Y vaya paradoja de la historia: fue la muerte de Néstor la que acabará terminando con "ese" peronismo de mausoleo. El definitivo nacimiento del kirchnerismo, y su componente jóven y vital, está dando origen a un peronismo distinto y en construcción. El tiempo, el liderazgo de Cristina y el calor militante, fijarán los contornos de este nuevo movimiento.
El viernes pasado sostuve (parezco Lilita Carrió) que se venía la estampida del peronismo decadente: primero fue Reutemann, luego De Narváez y el próximo seguramente Felipe Solá.
Algo los une: ninguno tiene adonde ir y, peor aun, ni siquiera parecen tener un plan. Actúan en base al influjo de las encuestas y de los cambios de clima. Es el sálvese quien pueda: cada uno negociará por separado su destino.
Los Rodríguez Saa sólo saldrán de San Luis por motivos mas bien románticos, o simplemente frívolos.
Das Neves es probable que vuelva a la facultad a cumplir su asignatura pendiente: recibirse de abogado.
¿Y Duhalde? Difícilmente Hernán López Echagüe tenga material para una tercera saga de "El Otro".
Quizás hoy sean Duhalde, Carrió y Magnetto las personas que mejor representan a una Argentina que la mayoría de la gente quiere dejar atrás. No es casual que Duhalde y Carrió hoy sean los mejores lobbistas de Magnetto y, a la vez, los que tengan menor intención de voto en cualquier encuesta.
Néstor lo hizo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=TnHgMR8Itzk
por favor divulgar

Anónimo dijo...

Se muere Kirchner, loco.

No es que haya habido un desbande en la oposición. Sólo se murió el que trababa todo. El Lole y los demás perucas decentes se van a adaptar a un país más tranquilo sin un peleador maleducado como era el tuerto.

Y el oficialismo, o sea el peronismo indecente, tb se tiene que adaptar.

Instituciones las pelotas... Somos un país tan desquiciado que se muere un tipo y cambia todo.