domingo, 18 de abril de 2010

JULIO BLANCK: EL INCENDIO Y LAS VISPERAS


La de arriba es la tapa de hoy del suplemento Ni a Palos.

El tipo de la cara desencajada en la entrevista a Carlos Escudé en Código Político, me refiero al periodista Julio Blanck, nos dedica a la blogósfera nac & popular su columna dominical en Clarín.

El tipo no se priva de ningún lugar común: nos trata de guerrilleros, rentados, idealistas boludos, autorreferenciales, envidiosos, oportunistas, fanáticos y resentidos.

¿Qué te pasa Blanck? ¿Estás crispado? ¿No era que la “guerra sucia” corría por nuestra cuenta? ¿Tanto les jodemos? Estás perdido Blanck… me das pena. Sí, creá un nuevo grupo de blogueros K y ubicame entre los que te tienen lástima.

Miren como arranca su columna Blanck: nos macartea por derecha y nos tira a la cara el fantasma de Chávez:

“Hugo Chávez, enérgico presidente de Venezuela desde hace ya once años. Acaba de fundar su "guerrilla comunicacional", una red de escuadrones de adolescentes, encargados de hostigar a los medios de comunicación enfrentados con su gobierno. Los guerrilleros, que tienen entre 13 y 17 años, usarán Internet, teléfonos celulares, incursionarán por Facebook y Twitter, repartirán volantes y pintarán murales en las calles, "para luchar contra la mentira y democratizar la información". ¿Le suena conocido?”
Más adelante precisa el enemigo:

“La laboriosa red (bloguera) kirchnerista reúne a militantes sinceros, tipos que han pasado la vida detrás de un ideal; pero también a una innegable manada de envidiosos, oportunistas, fanáticos y resentidos. Y hay intelectuales valiosos que ofrendan su libertad de pensar y elegir a dioses sin otro principio que su propia renta

¿Dónde te ubicarán los periodistas laburantes de tu diario Blanck? ¿Un idealista romanticón? No creo, ya pasaste esa etapa… Las otras dos opciones (manada de oportunistas o sin otro principio que su propia renta) son más jodidas aunque, entre nos, me jugaría unas fichitas.

En su Carta de renuncia a Clarín, el periodista Claudio Díaz decía: “ a Julio Blanck, le dí explicaciones acerca de por qué yo lo incluía en una lista de hombres de prensa que -desde mi punto de vista- sostienen un discurso “progresista” pero le terminan haciendo el juego al llamado establishment”

¡Cuánta razón Claudio Díaz! Miren cómo Blanck, que empezó tratándonos de guerrilleros, al final de su columna nos corre por izquierda y pretende tirarnos encima a Silvio Rodríguez y ¡al Che Guevara!:

“En el ejercicio autorreferencial que los sostiene frente a toda evidencia, quizás terminen por incluir entre los conjurados fantasmales del "clima destituyente" al trovador cubano Silvio Rodríguez, quien en Tonada del albedrío, canción de su último disco, Segunda Cita, canta:


Dijo Guevara el humano

que ningún intelectual

debe ser asalariado

del pensamiento oficial

Debe dar tristeza y frío

ser un hombre artificial

cabeza sin albedrío,

corazón condicional”


¿Se puede tomar en serio a este asalariado de la señora de Herrera de Noble? ¿Se puede ser tan desvergonzado? Kirschbaum… vos que sos el más lúcido… de onda te lo digo: Blanck no está preparado para esta pelea: no sólo Escudé lo dejó en ridículo esta semana, ahora nos quiere correr ¡Con Silvio Rodríguez y el Che Guevara! No puedo más de la risa, en serio…

Y me seguiría riendo… si no fuera porque acabo de pasar por el blog de Lucas y me doy con algunas precisiones sobre el “trabajo” que obligan a realizar en Clarín a algunos periodistas, según relata Jimena Arnolfi en el diario Miradas al Sur:

“La espía paradójica. Termina la marcha y me encuentro con otra colega. En su momento, ella fue una de las 30 contratadas por el Grupo Clarín para realizar una campaña política en contra de la ley de radiodifusión. Su tarea consistía en intervenir medios gráficos on line a través de la redacción de comentarios que se postean en las notas que se publican en los sitios. Ella contaba cuántos comentarios a favor o en contra de la ley aparecían, quiénes eran los usuarios, se peleaba con los bloggers k, bardeaba la ley. Otros se dedicaban a dejar mensajes grabados en las principales radios. Como comunicadora, defiende y apoya la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. “Siempre traté de contarle a todo el mundo el trabajo que tenía, para que la gente abra los ojos...”.

En otro fragmento de su carta de renuncia al diario Clarín, nos dice el periodista Claudio Díaz:

“Me voy avergonzado de la conducta de quienes deberían honrar el trabajo periodístico y no lo hacen”

Es simple Blanck… aunque invoques en vano al Che Guevara.

4 comentarios:

Chabon Piola dijo...

Me parece que hay algo muy enfermo en esta gente , no se van a mudar de pais cuando quieran.Me refiero a que lo de ellos es casi como pertenecer a una secta tipo Waco o Jim Jones . Se sale mal o muerto profesionalmente. Yo creo que los maneja mas el miedo que otra cosa.
La verdad pobres tipos , un pendejo con una compu cualquiera les mete mas miedo que cualquier politico influyente.

Marmaduke/Eddie/Matt dijo...

A mi me tienen cansado ya. Dicen que estamos rentados pero yo todavía no he visto un mango. ¿No será que los de Clarín se las arreglan para afanarle la guita a Aníbal para que no pueda mandar nada?

Ricardo dijo...

Cruzaron la línea y pensaron que nadie se daría cuenta. Cuando cayeron en que se habían dado cuenta, ya habían cruzado la línea.

Están jugadísimos. La Ley de Medios les come los tobillos.

Udi dijo...

Estimado Aldo: como siempre, muy bien escrito. El lenguaje coloquial le sienta, mi amigo.
¿El tema del post? Ah, qué se puede agregar que Ud. no haya ya dicho, y mejor.
El ¿aforismo? de Ricardo es un buen corolario,
saludos !