Siempre me intrigó el porqué de la obstinada fascinación que ejercen estos charlatanes de feria, en este caso el economista Carlos Melconián, sobre empresarios, profesionales y cierta clase media alta.
Esto se hace mucho más notable en sociedades provincianas, siempre más dispuestas a ver en carne y hueso a estos “gurús” que no aciertan una desde la década del
Como sostuve alguna vez acá, creo que este fenómeno es consecuencia de que los medios le regalaron durante casi 30 años la escena pública al discurso monocorde de los economistas neoliberales, y hasta lo asumieron gozosamente como propio.
Ahora vino a Tucumán este falso profeta a dejarnos clarísimo lo que nos espera en 2010. ¡Un grande!
¡Volvé Carrió, te extrañamos!
Mientras tanto, me voy conformando con este tipo:
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