lunes, 19 de diciembre de 2011

EL DISCRETO ENCANTO DEL PERONÓMETRO


Puedo entender, y lo entiendo, los intereses que defiende el líder camionero Hugo Moyano: por un lado, mantener el status quo en sindicatos y obras sociales. Por otro, comprendo perfectamente la puja de poder que plantea con el gobierno nacional: considera tener derechos adquiridos a mayores cuotas de poder. Y, por supuesto, nadie puede desconocer sus derechos a reclamar todos los aumentos salariales y mejoras que crea menester para los trabajadores.
Ahora bien, colocado Moyano en la dura disyuntiva política del CÓMO y CUANDO defender sus intereses y reclamar sus cuotas de poder, derrapó de manera ostensible:
En cuánto al CUANDO confrontar, se mostró como un principiante: eligió hacerlo con una Presidenta recién asumida y con márgenes de popularidad históricos según el diario opositor Perfil: "CFK mantiene imagen positiva pese a la quita de subsidios y el cepo al dólar". Si a ello sumamos la complicada imagen positiva de Moyano, es más que probable que su desafío a Cristina sólo tuviera el efecto de potenciar a la Presidenta en sus encuestas de popularidad.
En cuánto al CÓMO confrontar, se reveló como un viejo dirigente sindical: optó por revolear el peronómetro con permanentes alusiones (además de la escenografía montada al efecto) a Perón y Evita, a los cuales su corriente representaría mucho mejor que el PJ y el gobierno nacional. Un discurso efectivo para su núcleo duro, es cierto, pero políticamente atrasado, irrelevante para la mayoría de la sociedad y sin anclaje en la realidad. Peor aún, y esto sí que el peronismo no lo perdona: un discurso probadamente perdedor.
A las pruebas me remito: en el plano nacional, Duhalde y su esposa "Chiche" intentaron aglutinar al "auténtico" peronismo de Perón y Evita. Hoy cuidan sus nietos y sacan a pasear el perro.
En el plano provincial (me refiero a Tucumán: provincia peronista si las hay eh...), oportunamente Fernando Juri intentó lo mismo contra el gobernador Alperovich en Tucumán. Hoy preside la comisión de turismo de la legislatura tucumana.
A ambos (Duhalde y Juri) los envalentonaron, en su momento, los diarios opositores nacionales y provinciales, respectivamente, y luego les soltaron la mano.Ya habían cumplido su rol de "desgaste".
Y es que el pueblo no es boludo. Alguna vez Néstor Kirchner definió a estas apelaciones constantes al peronómetro como "el peronismo de mausoleo". Hasta hoy nadie logró una caracterización mejor.
Súmenle a ello que la mayoría de la población que efectivamente vota ni siquiera conoció a Perón: ya pasaron 37 años de su muerte. Tomemos a un jóven de 18 años en 1974 (muerte de Perón), hoy tiene 55 años y ni siquiera pudo tener la "vivencia" del mejor Perón de sus dos primeros períodos. De esos sólo quedan algunos de más de 75 años. ¿Por qué habría de creer el padrón electoral actual que Moyano es el auténtico peronismo? Es una apelación ilusoria: una ficción política sin ningún sustento fáctico ni sociológico serio.
Peor aún, si consideramos (supongo que todos coincidimos en eso) a la justicia social como la máxima aspiración del peronismo, ¿cómo piensa convencer Moyano a las bases peronistas de que este gobierno no se preocupó y consiguió importantes conquistas en la senda de la justicia social, incluidos los camioneros?
Empezaron mal: los diputados identificados con la C.G.T. no votaron el nuevo estatuto del peón rural (a toda luces superador respecto al vigente de la dictadura militar) en virtud de un abroquelamiento corporativo alrededor del "Momo" Venegas, probado defensor de los intereses de la Sociedad Rural.
Pasemos en limpio: no considero a Moyano el enemigo. Prefiero juzgarlo como un compañero equivocado. Eso sí: hay algo que tienen en claro todos los peronistas de ayer, hoy y mañana (de Perón, Evita, Néstor o Cristina): los equivocados (y perdedores) no van al paraíso.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

El Hugo procedió como los viejos sindicalistas porque es un sindicalista viejo: en enero cumplirá 68 añitos. Pero lo que parece que ha envejecido más que él es su mente que ha perdido ó extraviado algún módulo de memoria.
Los peronistas, más aún si son representantes de trabajadores, no deberían olvidar los siguientes vocablos:

MEMORIA, COHERENCIA, LEALTAD, MILITANCIA.

Si no se los emplea diariamente y a conciencia, su eventual "peronómetro" pueden ubicarlo en algún espacio no iluminado por el sol.

Saludos
Tilo, 70 años

eduardo dijo...

cumpa si hoy cierra con Luis ,Momo ,Micheli y gordos ,se acabó la comprensión,eso sí ya tiene el apoyo irrestricto de los medios,tapas de Clarín y horas en tn ,se me hace que el multi anda buscando que lo banquen en el asunto papel Prensa..Sería penoso..Yo lo banqué a hugo a muerte.Con los de CTA micheli discutí mal ,HOY ESTOS ESTÁN TRANSANDO CON HM Y ..TODOS CONTENTOS..qué principios..

Antonio (el Mayolero) dijo...

Ahora salieron los troscos a movilizar contra la ley que penaliza el terrorismo financiero con la monserga que podría afectar las movilizaciones sociales, ocultando cuidadosamente el texto de la ley que específicamente las despenaliza. Pero los troscos son así, necesitan del terrorismo financiero para poder tener razón de existir (¿y financiarse?)