¿Los cargos que se formulan a los integrantes de la impopular FARC justifican este accionar? A sangre fría nadie absolutamente tiene derecho a matar. Y si a ello sumamos que ese acto de barbarie lo llevó adelante Colombia violando la soberanía territorial de su vecino Ecuador, el cuadro de “doctrina antiterrorista era Bush” está completo. Ni siquiera en la época de las dictaduras militares los dictadores realizaron acciones como la que ordenó Uribe en Ecuador: hoy la “Doctrina de la Seguridad Nacional” y el “Plan Cóndor” lucen como demasiado sofisticados y poco pragmáticos, cuando basta con agitar el demonio terrorista. Lo dijo con claridad el Presidente de Bolivia Evo Morales en la OEA: “en Estados Unidos nos llamaban rojos, después nos dijeron cocaleros y, a partir del 11 de septiembre, nos dicen terroristas”. También fue contundente la Presidenta de Argentina Cristina Kirchner: "al terrorismo no se lo combate violando derechos humanos"
El niño mimado:
Colombia fue el único país sudamericano que Bush mencionó en su discurso sobre el estado de la unión ante el Congreso: “Es una cuestión de seguridad nacional, si no cumplimos con nuestros acuerdos vamos a abandonar a nuestro aliado de Sudamérica”, argumentó. También exhortó a aprobar el TLC con Bogotá. Uribe ya había dado suficientes pruebas de amor. Para quienes no creemos en las casualidades, resulta interesante destacar que un alto jefe militar estadounidense estuvo en Bogotá dos días antes del asesinato de Reyes. El visitante fue el contraalmirante Joseph Nimmich, director de la Fuerza de Tarea Conjunta Interagencial del Sur de Estados Unidos. Se reunió con el Comando General de las fuerzas armadas colombianas dos días antes del bombardeo sobre el campamento de las FARC.
Horacio Verbistky nos arroja claridad sobre los motivos: “En 1998 el general Charles E. Wilhelm dijo que “Venezuela sola provee la misma cantidad de petróleo a los Estados Unidos que todos los estados del Golfo Pérsico juntos” y que las grandes reservas de petróleo en Colombia y Ecuador realzan “la importancia estratégica de los recursos energéticos de esta región”. En 2004 el general James T. Hill reveló ante el Congreso y en una serie de conferencias ante académicos y empresarios (en el Consejo de las Américas, la Asociación Colombiano-Estadounidense, el Consejo Cubano-Estadounidense) que el comercio de su país con América Latina y el Caribe ascendía a 360.000 millones de dólares anuales, casi tanto como con toda Europa, y que para 2010 superará al que mantiene con Japón y con Europa sumados. En 2003, las empresas norteamericanas vendieron a los países del Mercosur “más que a China y la India juntas”, más a la República Dominicana que a la India, más a Honduras que a Rusia y más al Caribe que a Indonesia, Rusia y la India sumadas. La inversión directa estadounidense en América Latina y el Caribe superó los 270.000 millones de dólares, un 20 por ciento del total de sus inversiones en el mundo y más que en Medio Oriente, Asia y Africa sumadas. La región suministra más del 32 por ciento de las importaciones estadounidenses de petróleo, más que todos los países del Medio Oriente. La Cuenca del Amazonas posee el 20 por ciento de las fuentes de agua dulce del mundo y el 25 por ciento del oxígeno del planeta y de sus plantas únicas en el mundo se deriva el 25 por ciento de los productos farmacéuticos manufacturados en Estados Unidos. En 2005, el general Banz Craddok fijó como prioridad la denominada Guerra contra el Terrorismo, para impedir que la región sirva como santuario operativo contra Estados Unidos y sus intereses en la región y declaró su preocupación por la influencia venezolana. El año pasado, el almirante Jim Stavridis informó que la provisión de petróleo de la región había aumentado, al 34 por ciento de todas las importaciones de su país. Ese combustible pasa por el canal de Panamá. La prioridad del Comando Sur es Colombia, a la que hace un siglo Washington arrancó la franja de tierra que hoy es la república de Panamá”
Reacciones y epílogo:
Seguramente todo ese contexto contribuyó a que las reacciones iniciales estuvieran marcadas por las sobreactuaciones (sobre todo de parte de Chávez) y las bravuconadas de Correa y Uribe. Sin embargo, en líneas generales, hay escasos antecedentes en Latinoamérica de una respuesta de tanta envergadura y rapidez ante una violación de soberanía territorial.
Para sorpresas de todos, la OEA terminó jugando un papel fundamental en detener una escalada regional que no hubiera beneficiado a nadie, salvo a los EEUU. En ese marco, jugaron un papel fundamental Argentina, Brasil y México. ¿Y por qué no Chávez que terminó haciendo un llamado a tener la cabeza fría y hasta entonó un merengue para bajar la tensión?
Mario Wainfeld lo describe con precisión: “Chávez dio un curso de oratoria aplicado a templar el ambiente, supuestamente algo ajeno a su destreza. El despliegue realizado al efecto fue notable. Arrancó hablando generalidades, para distender al auditorio. La emprendió con una ristra de anécdotas que parecían no ir a ningún lado. Hizo reír a varios de sus pares. A Cristina cuando le recordó que le había mandado a “Néstor” a Villavicencio y evocó cuánto sudó Kirchner, “él, un pingüino de las tierras del hielo”. Al presidente de Guatemala cuando lo interpeló “¿tú has sido guerrillero o algo así?”, A Evo Morales cuando le recordó la existencia de Quispe, “uno que era más radical que tú”. Las puntadas tenían nudo, defendía el canje humanitario, la politización de los insurgentes, cuestionaba la paranoia americana. Enhebró el discurso merituando el valor de quienes piden disculpas. Y, tras haber avivado vientos de fronda, tildó, con plena sensatez, de “hecatombe” y de “catástrofe” cualquier hipótesis de guerra regional”
Vale la pena escuchar un fragmento de su discurso:
Me acordé del genial británico Harold Pinter, que cuando recibió su premio Nobel destacó: “Cuando miramos un espejo, pensamos que la imagen que nos ofrece es exacta. Pero si te mueves un milímetro la imagen cambia. Ahora mismo, nosotros estamos mirando un círculo de reflejos sin fin”
Y es que, al fin y al cabo, se trataba de un conflicto caribeño. Y en un baile tenés que bailar con la música que te tocó, no la podés cambiar. O bailás o no bailás. Si sos buen bailarín vas a encontrar la forma de bailar…
Si no me creen, miren unos minutos de esta obra de arte de Ettore Scola:
4 comentarios:
Separemos un poco las cuestiones: cierto, el ataque colombiano al campamento de las FARC en Ecuador es indefendible. Pero lo es porque se violó la soberanía de este último país y no por ser un supuesto "asesinato a sangre fria" ni mucho menos una violación de derechos humanos.
Se trato, por el contrario, de un ataque militar contra un objetivo claramente militar: los que dormían no eran angelitos. Reyes era el número 2 de las FARC y el resto, sus secuaces.
Esta organización, calificada como terrorista por las principales naciones del mundo, es un movimiento anacrónico responsable de cientos de miles de muertes, secuestros, etc.
Si el ataque se hubiera producido 1800 metros al norte hubiera sido inobjetable: nadie acusó a Colombia de haber causado "daños colaterales"; no murió ni fue herido ningún civil.
Hay que tener mucho cuidado con los análisis superficiales ¿Cómo pretende usted que luche Colombia contra la Guerrilla? ¿Mandar la policía a detenerlos?
A un ejercito irregular se lo combate con el ejercito. Lo contrario sería suicidio.
Francisco, confieso que inicialmente me alegró que calificaras de indefendible el ataque al campamento de las FARC. Sin embargo, a continuación lo defiendes bastante bien, incluso utilizando los mismos argumentos y terminología del mismísimo Uribe.
En cuanto al resto, me remito a mi "análisis superficial". Sólo me preocupa que no veas violación de derechos humanos alguna porque los que dormían "no eran angelitos". Me recuerda mucho al "algo habrán hecho" que justificó tantas desapariciones en nuestro país.
Ahh... y cuando hablo de "doctrina antiterrorista Bush" me refiero a esto: http://www.clarin.com/diario/2008/03/09/elmundo/i-02801.htm . Espero que no consideres "suicida" oponerme a esa y muchas otras prácticas antiterroristas. Como siempre, te dejo la última palabra si lo consideras necesario.
Perdón. No defiendo el ataque porque se produje en territorio de otro estado. Punto.
Ahora, su análisis también es equivocado. Acá hubo una violación de fronteras y no un asesinato a sangre fria ni mucho menos una violación masiva de derechos humanos.
Un campamento guerrillero no es un lugar a donde usted manda un policía, un abogado y un oficial de justicia a cumplir una orden de arresto. Salvo que sean terroristas muy estúpidos, deben tener guardias armados.
Ahora, que usted compare a este muchacho Reyes con las victimas del terrorismo de estado es preocupante:
a) A las victimas las secuestró, torturó y desapareció una dictadura militar. A Reyes lo mató el gobierno democrático de Colombia en una operación, repito ilegitima.
b) Las victimas estaban indefensas: los levantavan llendo a clases o al trabajo, en nuestras ciudades. A Reyes lo mataron en un campamento militar.
c) Las victimas, en su mayoría, eran inocentes o, simplemente, culpables de disentir u oponerse al régimen (lo que no es un delito). Reyes fue juzgado, condenado y era buscado por Interpol.
No quiero tener la última palabra. El disenso es muy bueno. Y en nuestro caso, barato. Distinto sería el caso en que ambos fuéramos Colombianos: usted, como funcionario, debería defenderme de las Farc. Y yo, soportar sus aciertos y errores.
Con todo respeto, ustedes no tienen ni idea de que están hablando. Cuando sepan quienes son realmente las malditas FARC, todas las porquerías que hacen, la forma de asesinar a los miles de colombianos que caen en sus manos, entonces ahi si atrévanse a abrir la boca para hacer sus desernimientos. Abran los ojos, abran sus oídos antes de abrir su boca.
Reyes murió, y se salvaron millones de vidas!!, y los "pobres ciudadanos" que dormían, ustedes creen que en los múltiples ataques realizados a la población mandaba carta previa de invitación?... Por Dios, la gente que murió ahi, solo eran terroristas, gente que solo su flia extrañará.
Cuando hablamos del ataque en territorio Ecuotoriano, porque entonces no hablamos tambien cuando las FARC nos atacan desde la frontera, desde territorio ecuotoriano?, por qué no hablamos de las jugadas de cartas de las FARC y las FFMM Ecuotorianas en San Miguel, por qué no hablamos tambien de eso?... Que la ley se aplique para los dos lados, porque no vamos a permitir que ataquen a los colombianos desde la tierra del indulto de las FARC.
Hablas de derechos humanos... el primer derecho es a la vida, y con la muerte de la guerrilla se salvan millones, contradícemelo si puedes... Se nota que jamás has visto que es lo que realmente hacen. Y estoy completamente de acuerdo con que es un análisis superficial, porque una cosa es ser el torero otra cosa un simple espectador de una corrida.
Publicar un comentario