lunes, 10 de agosto de 2015

LOS ILUSIONISTAS


El día que se escriba la corta historia de la Alianza tucumana nadie podrá prescindir de algunos términos para describir a José Cano y Domingo Amaya: grandilocuentes y pomposos, con tendencias irrefrenables a las bravuconadas, vendedores de ilusiones y, sobre todo, arquitectos de su propio fracaso.
Y es que ambos crearon ese engendro del "Acuerdo por el Bicentenario" pensando sólo en sus intereses personales, dejando de lado principios y conveniencias partidarias. Se creyeron los más vivos del barrio: era cuestión de juntarse y el triunfo era nada más que un trámite: sólo debían ser pragmáticos y demostrar vocación de poder: el "ruso" Alperovich los "había subestimado", decían con placer.
En el medio, Cano fue logrando que lo apoyaran todos los candidatos presidenciales de la oposición, casi al mismo ritmo que en el último mes se distanció con todos. Sin embargo, no se privó de nada a la hora de las concesiones graciables: al PRO le entregó, en cabeza de un ignoto, nada menos que la diputación nacional en primer término (un bocatto di cardenale para la UCR tucumana) y al amayismo la candidatura a la intendencia de la capital tucumana, la otra niña bonita por la que suspiraban los radicales. Y como las desgracias nunca vienen solas, se manejaron tan mal en la puja por la intendencia de Yerba Buena que se terminaron dividiendo en dos candidatos. Todo valía para que Cano sea gobernador.
Luego de la tremenda paliza que sufrieron Cano-Amaya en las PASO celebradas ayer en Tucumán, la mirada de correligionarios y ex peronistas en tránsito a ninguna parte se posó de golpe sobre sus "líderes y estrategas" candidatos a Gobernador y Vicegobernador en las próximas elecciones provinciales del 23 de agosto. La derrota está cantada dentro de 2 semanas para la alianza Cano-Amaya. El aire huele a pólvora y se adivina la estampida subterránea de dirigentes, sobre todo vinculados a Domingo Amaya.


Y es que hasta lo que parecía un trámite para la oposición, ganar el municipio de San Miguel de Tucumán, a partir del domingo se convirtió en una pesadilla por el clarísimo triunfo del FPV hasta en la capital tucumana, históricamente esquiva para el peronismo.
Con ese panorama, el amayismo, que sabe perdida la pelea por la gobernación, pondrá todos sus cañones estas dos semanas en tratar de retener la capital. Allí destinarán todos sus recursos. Y el diputado nacional José Cano verá en estos días como empieza a licuarse su "poder de seducción". Súbitamente, al no consumarse "La Gran Estafa", George Clooney volverá a ser el "gallego" Cano
Y para la candidata a senadora nacional Silvia Elías de Perez, a partir del 24 de agosto, Domingo Amaya y Germán Alfaro volverán a ser "Los sospechosos de siempre".
Los peronistas, en cambio, nos acordaremos de una frase del General Perón"...les espera el oscuro y sombrío túnel del ostracismo, al que por lo general, suelen estar condenados los traidores..." 

2 comentarios:

Felix Jimenez dijo...

Quod natura non dat, Photoshop non præstat... Asi como los publicitas de la Alianza Tucumana fusionaron con Photoshop la cara de Cano con la de George Clooney a nivel nacional el publicista de Macri está tratando, con alguna magia, de fusionar su trayectoria política con la de los líderes del movimiento nacional y popular peronista.

Omar.- dijo...

Muy bueno Aldo, y pronto nomas ya no va aser ni siquiera "el gallego Cano" sino, "Cano agarramela con la mano" jeje...Chantas totales.-