miércoles, 3 de diciembre de 2014

POR SUERTE EXISTEN LOS PORTEÑOS


Para que vengan a darnos conferencias al interior del país y nos iluminen acerca de diversos aspectos de la realidad.
En el ciclo de conferencias del matutino La Gaceta le llegó el turno (otra vez !!!)a la ensayista (no tengo referentes en ese rubro) Beatriz Sarlo, y una nota del diario nos adelanta el contenido de su charla "Ciudad y Política". Les dejo los principales tópicos:

Hay que pensar en las desigualdades que produce la ciudad”, dice. Y enseguida pasa a postular que San Miguel de Tucumán es una ciudad “grande” y, como tal, presenta los problemas propios de establecer cómo se reparte y se usa el espacio público; quiénes tienen derecho a él y qué se considera propiedad privada. “En ciudades como Tucumán, Buenos Aires, Mar del Plata, Rosario y Córdoba, buena parte de la población vive en condiciones inadmisibles desde el punto de vista de la justicia distributiva. Uno lo ve en la capital tucumana, donde hay zonas con una muy buena urbanización y de alta calidad, y zonas de una pobreza extrema”, apunta.

En cuanto a los tamaños, la catedrática sostiene que en Argentina no hay ninguna megalópolis, que es la versión más avanzada de la ciudad contemporánea. “Tenemos que sacarnos eso de la cabeza. San Pablo (Brasil) es una megalópolis y no existe nada semejante a eso en nuestro país. Ello nos devuelve al lugar que ocupamos en el presente porque, durante décadas y décadas, Buenos Aires fue la ciudad más grande de América Latina: ya no. Aquí simplemente tenemos ciudades grandes”. La diferencia entre estas y las pequeñas (de hasta 80.000 habitantes) es que en las primeras la distribución de los bienes es más abstracta. Sarlo explica que en un centro urbano pequeño las injusticias y las corrupciones pueden no ser remediadas, pero, en contraposición, resultan fáciles de conocer de manera concreta. “Las ciudades grandes son más abstractas: un ciudadano puede presuponer la corrupción, una mala distribución de los bienes públicos y el engaño, pero necesita de largas mediaciones institucionales para llegar al punto donde la responsabilidad está dada.

¡Ahora se nos aclara el panorama a los provincianos tucumanos! ¡Ya sabemos dónde estamos parados!
¡Gracias Beatriz!

Para que el menú "intelectual" esté completo, como corresponde, no podían faltar las referencias Borgeanas: "La preocupación por la ciudad que profesa Beatriz Sarlo (1942, Buenos Aires) le viene, en parte, de la lectura de “El Inmortal”. Este cuento de Jorge Luis Borges narra la historia de una ciudad asolada por los trogloditas. “Con las reliquias de las ruinas erigieron, en el mismo lugar, la desatinada ciudad que yo recorrí: suerte de parodia o de reverso, y también templo de los dioses irracionales que manejan el mundo y de los que nada sabemos, salvo que no se parecen al hombre”, escribió el autor universal.
Y a la "civilización o barbarie" de Sarmiento: "Sarlo anticipa que planteará la dicotomía que presenta la ciudad: “para Domingo F. Sarmiento, la ciudad fue la resolución de los problemas del país: es decir, la barbarie estaba en los campos"

Todo muy berreta. Los intelectuales de derecha están cada vez más predecibles, patéticos y atados a los tópicos del pasado.
Pero no niego algo... en parte los admiro: increíblemente cobran por decir estas cosas!
Chapeau Beatriz!

1 comentario:

Politico Aficionado dijo...

Se vé que no la traga a la Sarlo.
Somos dos.