Bastaría analizar los titulares de la prensa internacional referidos a Europa de esta última semana para comprobar la absoluta inutilidad de gobernar o regir la economía de los países por
"las reacciones de los mercados" o, como gusta titular absurdamente la prensa local:
"guiño a los mercados".
Y es que resulta demasiado obvio: los llamados "mercados" son un reducidísimo y exclusivo grupúsculo de la población mundial que tiene, sobre todo, intereses, ideología e ilimitado ánimo de lucro. Como lógica consecuencia de ello, poco les interesa los gobiernos de turno en los países (les da igual el PP o el PS español, por ejemplo) y mucho menos los conmueve el bienestar ni la mejoría en la calidad de vida de la población mundial.
Nadie lo describió mejor que la francesa Viviane Forrester en "El Horror Económico":
"Sucede que el Estado no es lo mismo que el poder. Este último (que se burla de los Estados, que suele entregarlos en concesión y delegarlos para administrarlos mejor) nunca cambió de manos. Las clases dirigentes de la economía privada en ocasiones perdieron el Estado, pero nunca el poder.
Estas clases (o castas) jamás dejaron de actuar, suplantar, acechar. Tentadoras, dueñas de las seducciones, sus privilegios siguen siendo objeto de las fantasías y los deseos de la mayoría, incluso los de aquellos que dicen sinceramente que los combaten. Esa autoridad que no siempre confiere el Estado pero que es inherente al poder, la han conservado permanentemente”
Los argentinos lo sabemos de sobra: nos pasamos toda la década del 90 agradando a los mercados, haciéndole "guiños", aplaudiendo las positivas "reacciones de los mercados" y así terminamos: primero, clima de histeria colectiva por el avance del riesgo país y las calificaciones de las consultoras internacionales, segundo: exclusión social de gran parte de la población, desempleo y hambre.
La exacta receta que por estos días afecta a todo un continente: Europa, en manos de los adoradores y psicópatas del "dios mercado". Auténticos modernos genocidas de guante blanco que reemplazaron los campos de concentración por ejércitos de desocupados que vegetan en las grandes ciudades condenados a la depresión y a la ausencia de futuro.
Sigamos con Viviane Forrester:
“Una mayoría de seres humanos ha dejado de ser necesaria para el pequeño número que, por regir la economía, detenta el poder. Según la lógica dominante, multitudes de seres humanos carecen de motivo racional para vivir en este mundo donde, sin embargo, llegaron a la vida. Por otra parte, cierta obstrucción atávica de la conciencia impide aceptar de entrada semejante implosión: es difícil reconocer e inconcebible declarar que la presencia de una multitud de seres humanos se vuelve precaria, superflua, costosa, excesivamente costosa.
El sistema descansa sobre cimientos podridos, más permeables que nunca a toda forma de violencia y perversidad. Sus rutinas giran en el vacío y nos mantienen adormecidos en la violencia de la calma. Esa violencia se prolonga y actúa, indetectable. Entre otras funciones suscita una resignación generalizada tal, que uno ya no sabe a qué se ha resignado: ¡tan hábil es para imponer el olvido!”
Valga esta larga introducción para entender esta cronología de los titulares de los últimos 4 días acerca de la crisis en Europa:
"Los líderes de Francia y Alemania acordaron este lunes un plan maestro para imponer una mayor disciplina fiscal a lo largo de la zona euro, diciendo que el tratado constitutivo de la Unión Europea tendrá que ser cambiado para dar una solución integral a la crisis actual.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, dijeron que su propuesta incluía sanciones automáticas para los Gobiernos que no logren mantener sus déficits bajo control, y el lanzamiento anticipado de un fondo de rescate permanente para los países de la zona euro en problemas.
Italia, el mayor país de la zona euro en caer víctima de la crisis, ofreció una luz de esperanza de que podría mejorar sus finanzas públicas al anunciar un duro plan de austeridad, el cual fue recibido con optimismo por los mercados" "Las aguas van volviendo a su cauce en Europa. Poco a poco, el
histerismo desatado semanas atrás en el futuro de la eurozona se va
aplacando, aunque tratándose del Viejo Continente, es pronto para
cantar victoria. Las bolsas continuaron hoy con la recuperación
iniciada la semana pasada y la confianza se mantuvo tras la esperada
comparecencia de Angela Merkel y Nicolas Sarkozy para anunciar sus
planes para reformar la Unión Europea"
¿Se entiende? Felicidad de los mercados por la puesta en marcha del equivalente a nivel Europa del "deficit cero" que impulsó Cavallo por acá previo al estallido del 2001.
Sin embargo, al otro día de la felicidad (el martes 6), ¡ay!, se derrumban los mercados. Sí, si, al otro día. ¿Por qué?
Veamos:"La calificadora de riesgos financieros Standard & Poors degradó la nota de 15 de los 17 países de la Eurozona, incluidos los seis con máxima calificación crediticia AAA, con lo que acentuó la presión sobre los países europeos, a dos días de una cumbre decisiva para contener la propagación de la crisis de la deuda.
El anuncio provocó caídas en las bolsas asiáticas y vaivenes en las europeas. Además, sembró dudas sobre las propuestas que hicieron ayer el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la jefa de Gobierno de Alemania, Angela Merkel, para reconquistar la confianza de los mercados a través de un nuevo Tratado que refuerce la disciplina presupuestaria del bloque"
Traducción: los mercados estamos felices, pero los estamos vigilando. Más vale que aprueben el tratado de déficit cero o nos pondremos loquitos. Tronará el escarmiento.
Día miércoles 7 (apenas ayer): silencio stampa de "los líderes" europeos.
"El riesgo de que estalle Europa nunca fue mayor", estimó Sarkozy, y agregó que la Unión Europea tiene sólo algunas semanas para salir de la crisis. Lo dijo pocas horas antes de que se inicie la reunión cumbre para tratar la crisis de la eurozona. "Hay que decidir lo antes posible. Cuanto más demoremos en tomar una decisión, más nos costará tomarla y menos eficaz será (...) Si el viernes no llegamos a un acuerdo, no tendremos una segunda oportunidad", dijo Sarkozy, horas antes del inicio de una cumbre de la Unión Europea en la noche del jueves en Bruselas"
Lo que se dice un buen alumno eh...
Así están hoy en Europa, luego de más de una década de rendirle pleitesías al mercado. A punto de hacerle la última y ya inútil ofrenda: la de Cavallo y su déficit cero. Increíble como se repite la historia.
Tengo una certeza: el año 2012 será del fin del euro y la disolución de la Unión Europea. Sólo falta saber a qué costo en violencia y vidas humanas y, eso sí, como "reaccionarán los mercados".
Mañana, sus gladiadores, se disponen a realizarle un último "guiño". Tampoco nada nuevo en la historia. Era una regla de estilo en el imperio romano:
Ave, Caesar, morituri te salutant (Salud, César, los que van a morir te saludan)